El gobierno mexicano no transferirá la administración del agua ni propondrá esquemas privatizadores para la nueva ley general sea privatizadora, advirtió la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
“La administración del agua, debe de hacerse lo que hoy establece el artículo 27 constitucional, lo debe hacer el Estado y, por lo tanto, no hay manera de que la Ley General de Aguas prevea alguna situación en donde la administración de las aguas pase a un privado, no debe de ser una ley privatizadora”, aseguró el director del organismo, Roberto Ramírez de la Parra, durante las mesas de trabajo sobre este tema que se realizan en el Senado de la República.
Precisó, además, que la nueva ley debe garantizar el acceso al agua a los grupos más vulnerables del país, así como evitar la sobreexplotación de los mantos acuíferos y establecer tarifas diferenciadas.
“Tenemos que priorizar a nuestros grupos más vulnerables, los indígenas, los niños, las mujeres, las personas que menos tienen, tenemos que a dar a esas personas el tema del agua. Tienen que fijarse las tarifas del agua, de acuerdo con el poder adquisitivo que tiene la población. Es evidente que hay población que es imposible que pague lo que le cuesta llevar y de ahí que debe haber tarifas diferenciadas. Y es evidente que el agua que no se utilice, tenemos que mandarla a los bancos”, explicó el funcionario.