AGENCIA
Encabezada por los sobrevivientes de la masacre de Tlatelolco, aglutinados en el Comité 68, como David Roura y Oscar Menéndez, y alzando la "V" de la victoria y al grito de “2 de octubre no se olvida”, se dio la marcha conmemorativa por los 50 años de este crimen de Estado.
En punto de las 16:15horas de ayer y cargando una fotografía de Raúl Álvarez Garín, dirigente del 68, la protesta arrancó sobre Eje Central y Flores Magón a la altura del Centro Cultural Universitario Tlatelolco, a la cual se han sumado estudiantes de diversas organizaciones y universidades de la Ciudad de México.
La manifestación fue acompañada por los padres de los 43 estudiantes desaparecidos de la escuela normal rural de Ayotzinapa Raúl Isidro Burgos; los pobladores de San Salvador Atenco y el Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra; la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México, y representantes de la Asamblea Interuniversitaria.
En los contingentes estudiantiles se observaron carteles que exigen justicia para los caídos hace medio siglo.
“Ni perdón ni olvido, castigo a los asesinos”, “2 de octubre no se olvida es de lucha combativa” y “De norte a sur, de este a oeste, ganaremos esta lucha, cueste lo que cueste”, fueron algunas de las consignas.
La marcha llegó al Zócalo capitalino antes de las 18:10 horas, para guardar un minuto de silencio por los caídos en el movimiento estudiantil, puesto que cada año se guarda un minuto de silencio a esta hora, debido a que es el momento en el cual se tiene registrado que se lanzaron las luces de bengala que dieron inicio a los disparos y la matanza de estudiantes y civiles.
Posteriormente se dio el pase de lista de los caídos en el 2 de octubre. Integrantes del Comité ‘68 dieron un discurso por los 50 años del movimiento estudiantil; también hicieron uso de la voz los padres de los normalistas de Ayotzinapa, los ejidatarios de San Salvador Atenco; y representantes de otras organizaciones sociales.
En su camino a la Plaza de la Constitución, realizaron pintas en el bajo puente de Eje Central Lázaro Cárdenas y Paseo de la Reforma, y contaron hasta 43 en recuerdo de los normalistas desaparecidos en Iguala, Guerrero.
El 50 aniversario de la peor masacre de estudiantes ocurrida en México, la del 2 de octubre de 1968, se conmemoró además con actos culturales, y la promesa del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, de jamás reprimir al pueblo.
“Nunca, jamás, daré la orden a las Fuerzas Armadas, a la Marina, al Ejército, a ninguna corporación policiaca para reprimir al pueblo de México”, declaró en la mañana en Tlatelolco, donde colocó una ofrenda.
Entre coronas de ores blancas, una sencilla cruz del mismo color con un lazo negro y el lema “Ni perdón ni olvido”, se comprometió a honrar la memoria de los jóvenes estudiantes fallecidos.
Durante la marcha los participantes se pintaron color oro, dorado, blanco, guinda y azul.
Ondearon banderas de todos tamaños de la Universidad Nacional Autónoma de México, del Instituto Politécnico Nacional y de la Universidad Autónoma Metropolitana.
Al minuto de silencio lo sucedieron los goyas de los estudiantes, una mano en el centro de la tarima se alza y luego otras las preceden. Es la "V" de victoria y el silencio impera. “¡2 de octubre no se olvida!” ruge en el silencio.