AGENCIA
Los hermanos Héctor Mario “Mayo” y Luis Manuel “Meño” Hernández, detenidos el pasado domingo por su presunta participación en el asesinato de nueve miembros de la familia LeBarón, se dedicaban a trabajar en el rancho y cuidar a su padre, quien por cuestiones de salud es dependiente de cuidador, expresó la familia.
“Los agarraron para taparle el ojo al macho”, expresó José Luis Parra, cuñado de los detenidos, al explicar que al momento de la detención, las corporaciones federales sembraron un paquete con droga en el domicilio y que fue esto lo único ilegal que encontraron al interior del mismo.
“Quebraron un vidrio con un bulto, al parecer droga, y entraron y les dijeron que eso era de ellos, pero no les hallaron nada más”, señaló José Luis Parra, quien agregó que el domingo por la mañana, en el exterior de la casa, había elementos de la Fiscalía de la República, Marina y muchas unidades. “Mucha ley” apuntó.
De acuerdo al testimonio de José Luis Parra, Mario trabaja en un pequeño rancho ganadero que tiene en el municipio de Janos, mientras que Manuel se dedica de lleno a cuidar al padre de ambos, ya que es un hombre viudo que tras una embolia requiere cuidado permanente.
“Realmente ellos no pueden salir porque mi suegro necesita cuidados todo el día, no habla, no se mueve y ellos lo cambian, lo bañan, lo alimentan y hacen todo, así que no pueden salir a ningún lado”, enfatizó.
Aunado a ello, comentó que la detención de "Mayo", de 35 años, y "Meño", de 42, tomó por sorpresa a todos los habitantes de Janos y la región, pues ambas personas son conocidas y queridas por los pobladores de la zona, de tal manera que durante los bloqueos carreteros y manifestaciones, unas 300 personas acudieron a exigir la liberación de los hermanos Hernández por considerarlos chivos expiatorios de la justicia.
Patricia Hernández, hermana de los detenidos, es quien ha encabezado este movimiento haciendo un llamado a la justicia y la verdad; no obstante, no tiene recursos económicos suficientes para viajar a la Ciudad de México, lugar al que, supuestamente, fueron trasladados sus familiares.