*Aunque la mayoría pensó que el despido del director de Protección Civil de Veracruz, José de Jesús Huergo Gutiérrez, fue producto de la enemistad que tenía con el comandante de Bomberos, José Adolfo Zugasti Cueva, la realidad fue otra y muy grave. El problema derivó porque el ahora exfuncionario envió a un jefe de turno a revisar un anuncio espectacular de una empresa llantera. Tras la inspección, el lugar presentaba anomalías serias y era un peligro. En lugar de retirarlo, los elementos, se supone que con la anuencia de Huergo, pidieron dinero a cambio de hacerse de la vista gorda. Sin embargo los trabajadores municipales no contaban que el empresario extorsionado es familiar del alcalde, Ramón Poo Gil, quien apenas se enteró del caso, dio de baja ipso facto al hoy exdirector.
*Vaya resbalón de la directiva de los Tiburones Rojos de Veracruz. Por la mañana de ayer informaron a la prensa que no habría acceso al encuentro de preparación que tuvo el equipo en contra de Oaxaca. Lo curioso es que de nada sirvió que no dejaran pasar a fotógrafos y reporteros, porque a la hora del juego, en redes sociales, se daba santo y seña de todo lo que pasaba e incluso hasta imágenes en vivo.
*Mientras el país pone los ojos en el municipio de San Juan Evangelista por la ola de suicidios suscitado en esa zona del sur, el secretario de Salud del Estado, Juan Antonio Nemi Dib, puso fin al caso diciendo que esas muertes se deben el intenso calor de la región. Afirmó que los suicidios son algo recurrentes en regiones calientes como Quintana Roo y Chiapas. De golpe y porrazo, arregló y explicó el problema, que aún es estudiado por investigadores y psicólogos.
*Mujeres informantes de varias dependencias de gobierno, agredieron a golpes e insultos a una trabajadora del Ayuntamiento de Veracruz. Todo empezó porque ambas, conocidas en el gremio como Las Palomas, intentaron ingresar a la Sala de Cabildo a una sesión ordinaria. Los empleados de la Dirección de Comunicación Social les impidieron el paso, lo que originó que las dos mujeres se le fueran encima a una de las empleadas. Al parecer, la directora Elisa Tagle va a proceder legalmente contra ellas.
*En la próxima sesión del Órgano de Gobierno del SAS se exigirá a la dirección de ese organismo una explicación del porqué desde el año pasado en el rubro de servicios personales, tienen un gasto anual de 24 millones de pesos. Ese dinero destinado al pago de salarios, es muy alto si se tiene en cuenta que en Boca del Río, en el área de presidencia gastan un millón 200 mil pesos al año y mucho menos en otros municipios como Veracruz y Medellín.
