* Con visibles huellas de tortura y con el rostro vendado, fueron arrojados los cuerpos sin vida de dos hombres a un costado de la carretera federal número 129, en el tramo Martínez-Tlapacoyan, en la comunidad Piedra Pinta en Tlapacoyan
* Uno de ellos ha sido identificado como Luis Alberto Silva, vivía en la colonia San José en Martínez de la Torre
Juan Carlos Jiménez B.
Tlapacoyan, Ver.- La mañana del sábado se dio el hallazgo de dos cuerpos sin vida, a un costado de la carretera federal número 129, en el tramo Martínez-Tlapacoyan en la localidad de Piedra Pinta, donde vecinos angustiados por la situación que vivieron pidieron el apoyo a la policía municipal para tomar conocimiento de lo ocurrido.
Fue cerca de las 8 de la mañana cuando los cuerpos de seguridad fueron alertados sobre el hallazgo de dos personas sin vida, los cuales mostraban claras huellas de tortura, además de encontrarse vendados de los ojos con manchas de líquido hemático.
Situación por la cual los uniformados se apersonaron en el lugar para realizar el acordonamiento en la zona del hallazgo, sumándose a esto el personal de la policía estatal para implementar los protocolos correspondientes y no contaminar la zona del hallazgo.
También fue informado el personal de la Policía Ministerial realizando los protocolos correspondientes, no lográndose conocer los generales de los occisos toda vez que ninguno de los dos portaba pertenencias, siendo identificado uno de ellos como Luis Alberto Silva Monfil, quien tenía su domicilio en la colonia San José, del municipio de Martínez de la Torre.
El primero vestía una playera blanca y unas bermudas color kaki, mientras que el otro según vestía unas bermudas de mezclilla color negro y una playera sisada color gris, ambos fueron trasladados al Servicio Médico Forense de la ciudad de Martínez de la Torre.
Tras información que se fue recabando en torno a este hecho parece indicar que estos dos occisos tienen relación directa con el hallado en la localidad de Las Cañadas perteneciente a Martínez de la Torre, debido a que en Tlapacoyan únicamente fueron abandonados, más no ejecutados.
