Juan Carlos Jiménez
Con la incredulidad de muchas personas y asegurar que el anunciar la muerte de una peligrosa persona para la sociedad, era solo un teatro para limpiar el trabajo de las corporaciones policíacas o el Ministerio Público, se confirma el deceso de Juan Arellano Ventura mejor conocido como Juan “Bata”.
Fue la mañana de este miércoles cuando familiares y conocidos le dieron el último adiós con una misa de cuerpo presente a las seis de la mañana y posteriormente el sepelio en el panteón de Dolores.
Se logró saber que sus restos mortales quedaron sepultados en el lote número 14 de la línea 1 del citado panteón, hasta donde la ciudadanía incrédula podrá acudir a visitar su tumba y corroborar el hecho anunciado.
Lo que si queda de manifiesto es la ineficacia del personal de la Fiscalía General del Estado en el municipio de Tlapacoyan, debido a que nunca consignó los diversos delitos en los que el ahora occiso fue el autor intelectual.
También cabe señalar que esta persona no estaría finada si la fiscalía hubiera hecho su trabajo, pero tampoco estaría libre y si en el reclusorio de Jalacingo, donde sus familiares lo podrían visitar en vida, pero la suerte de esta persona queda para la historia de Tlapacoyan que al final terminó en una tumba a la edad de 41 años.
