- Delincuentes armados irrumpen a media noche en la parroquia de la colonia Petromex y luego de golpearlos y obligarlos a entregar un dinero, los llevan hasta ‘La Curva del Diablo’ donde los ejecutan.
- Chofer del Padre Alejo logra escapar y ya entrada la mañana de ayer avisó a las autoridades e inició intenso operativo hasta que se localizan a los dos representantes de la iglesia ya sin vida.
Carlos Sánchez Hernández
Poza Rica
El padre Alejo Nabor Jiménez Juárez, quien desde algunos años se encontraba asignado a la parroquia de ‘Nuestra Señora de Fátima’ de la colonia Petromex y el sacerdote José Alfredo Suárez de la Cruz, fueron privados de su libertad la noche del domingo, juntos con su auxiliar de nombre Miguel.
Los dos primeros, quienes habían consagrado su vida a Dios y gozaban de gran estima entre la comunidad católica, fueron encontrados muertos ayer en la llamada “Curva del Diablo” a eso de las 13:00 horas, entre Poza Rica y Papantla, en tanto el auxiliar, apareció alrededor de las diez de la mañana luego de haber escapado de los delincuentes.
Elementos de la Fuerza Civil, Ejército y Marina apenas un día antes iniciaron un fuerte operativo en la zona que se vio rebasado ante este cobarde doble asesinato, que se viene a sumar a los tantos ocurridos en los últimos días en diferentes puntos de la ciudad.
El hallazgo de los cuerpos se registró poco después del mediodía gracias a que el auxiliar de los ahora occisos logró escapar con vida para horas después dar parte a las autoridades de lo ocurrido, y se logró saber que los asesinos además de “levantar” a los párrocos también se llevaron dinero en efectivo que sería utilizado para la remodelación de la parroquia y dos vehículos un Mitsubishi tipo Lanzer y una camioneta Nissan.
En torno a los hechos, se sabe que los dos curas y el chofer de uno de ellos, fueron privados de su libertad por al menos cuatro sujetos y una mujer armados que se transportaban a bordo de una camioneta, quienes luego de someterlos, los golpearon hasta que les entregaron una fuerte cantidad de dinero.
En la parroquia había rastros de sangre; Miguel, chofer de Alejo, quien logró escapar de sus captores, refiere que luego de salir de la capilla los llevaron a un paraje solitario, los hincaron y comenzaron a amarrar a los sacerdotes y él en un descuido arrancó a correr hacia el monte, sin embargo, el miedo lo inundó por completo y se quedó entre la maleza hasta que amaneció.
El sobreviviente asegura que escuchó disparos y más se aterró, por eso se quedó hasta el amanecer, lamentablemente nadie quiso ayudarlo cuando caminaba por la carretera hasta que llegó a la parroquia para pedir ayuda.
Fue en ese momento cuando se activaron las autoridades preventivas de los tres niveles de gobierno hasta dar con el paradero de los cuerpos de los sacerdotes, Alejo Nabor Jiménez Juárez, de 50 años de edad y de José Alfredo Juárez de la Cruz de 30 años, ambos presentaban impactos de bala.
Personal de la Fiscalía General del Estado de Papantla se trasladó al lugar conocido como ‘La Curva del Diablo’, ubicada sobre la carretera Poza Rica-Papantla, en el lugar fueron encontrados los cuerpos maniatados y sin vida, por lo cual fueron levantados y trasladados a Papantla.
El lugar se vio asegurado por elementos de la Policía Municipal de Papantla, elementos de la Fuerza Civil y del Ejército Mexicano, tras levantar el cuerpo continuaron con las diligencias, el chofer y sobreviviente fue entrevistado por los elementos de la Policía Ministerial que investigan el doble homicidio.
Ayer mismo la Diócesis de Papantla a través de su página Web expresaba su profundo pesar y comunicaba el lamentable fallecimiento de los Presbíteros Alejo Nabor Jiménez Juárez y José Alfredo Suárez de la Cruz.
Por quienes pedía elevar oraciones por el eterno descanso de sus almas y al tiempo de pedir a sus feligreses unirse en oración como Iglesia, para que Cristo Rey de Paz traiga concordia a nuestra patria.
