Señalan que esos movimientos son para favorecer a adinerados como Carlos Gallegos Perales
Facundo Bartolo Salazar
Habitantes de la llamada colonia Azucarera manifestaron su malestar por los arbitrarios desalojos que constantemente promueven y llegan a ejecutar las autoridades, siendo promovidos tales desalojos por particulares, incluso quienes están acaparando lotes en ese asentamiento humano. En ese contexto, hubo la tarde de ayer un segundo intento de desalojo fallido en la calle Refinería sin número, en el domicilio de Verónica Pérez Cruz, quien lleva 14 años viviendo en el lugar y a pesar de ello, las autoridades hacen caso omiso de los derechos creados durante ese tiempo.
Los vecinos de la citada colonia mencionaron que es tal la incertidumbre y confusión que existe, que el terreno donde vive es reclamado por un tal Benigno González, quien se decía el auténtico propietario y por ello vendió ese espacio a Carlos Gallegos Perales, quien al parecer está promoviendo ahora nuevos intentos de desalojo, pues afirmaron que con su dinero tiene la posibilidad de hacer todos los movimientos necesarios con las autoridades. Afirmaron los declarantes que ese individuo ha logrado desalojar por lo menos cuatro lotes de esa misma colonia, situación que consideraron irregular y que debe ser del conocimiento de las autoridades correspondientes.
Insistieron en que a estas alturas, ya ni siquiera es el Sindicato Azucarero el que reclama los lotes de la colonia Azucarera, sino que son terceras personas que ahora intentan despojarlos de un patrimonio que ya es de su propiedad, por el tiempo en que lo han habitado. Dijeron tener conocimiento de que la dirigencia nacional de los obreros azucareros ya se ha desentendido de la problemática con el citado predio, por lo que la Sección 105 debería desistir por lo menos de sus denuncias, para dar paso a la prescripción positiva, de acuerdo con la cual los actuales posesionarios de lotes de la colonia Azucarera deben ser los propietarios de los mismos, pues en su mayoría llevan 14 años habitándolos.
Los inconformes hicieron un llamado a las autoridades para que tengan a bien comprender la compleja situación que impera en la colonia de referencia, pues relataron que la primera vez que intentaron desalojar a Verónica Pérez Cruz, estuvieron a punto de lastimar a su menor hijo, quien tomó con sus manos las cadenas que aseguraban la entrada mientras las autoridades intentaban cortarlas. Cabe hacer mención que en el segundo intento de desalojo de ayer a las dos de la tarde, la diligencia no se concretó, en virtud de que la afectada no estaba en casa por encontrarse trabajando. En dicha vivienda había tan solo menores de edad, sin posibilidades de responder legalmente. Desafortunadamente, no descartaron la posibilidad de que sea intentado nuevamente un desalojo, pero señalaron que no es posible que esos movimientos sean para favorecer a un particular, quien por su dinero tiene todas las facilidades.