De comprobarse el hecho, la empresa en cuestión tendría que indemnizar generosamente a la familia
Facundo Bartolo Salazar
En caso de que algún suplemento alimenticio mate a algún consumidor, la empresa responsable indemnizaría generosamente a la familia afectada, tras una rigurosa investigación en la que lo anterior quedase demostrado, pero si eso no sucede, serían demandadas por cantidades millonarias las personas que afirmen falsamente que ese tipo de productos ha ocasionado algún daño, manifestó el distribuidor de conocida marca.
En relación a la muerte de una mujer presuntamente por consumir malteadas de Herbalife, productos de los que se dice, contienen plomo, el declarante comentó que ese caso se tendría que estudiar con un rigor científico, pues son personas altamente especializadas quienes en esa y otras empresas crean los diversos suplementos alimenticios para tratar enfermedades, principalmente con sustancias de origen natural.
Asimismo, opinó que es muy poco probable que algún producto de esa naturaleza haya causado la muerte de alguien, pues quienes recomiendan su consumo lo hacen tras conocer perfectamente el problema que aqueja al cliente. Dijo que solamente de esa manera es posible dar un suplemento alimenticio que en realidad ayude a la persona afectada a mejorar su salud y calidad de vida, sin que le resulte inútil, o bien le cause efectos indeseados.
Indicó que en el caso de los productos para adelgazar, es indispensable platicar con la persona afectada para determinar las causas que han originado su obesidad, pues quizá el problema no tenga que ver tanto con la alimentación, sino también con problemas hormonales. Expuso que con ese tipo de tratamientos, lo máximo que le puede pasar a alguien es que tenga un poco de diarrea, misma que puede ser una reacción muy natural, al comenzar a limpiarse su organismo, dando pie para la aplicación de otros productos que le ayudarán a bajar de peso y lograr las metas deseadas en ese contexto.
El distribuidor mencionó que generalmente son una serie de productos, mismos que se combinan para obtener mejoría ante los problemas planteados por los consumidores. Reiteró que, naturalmente, es necesario ajustarse a las diversas necesidades de las personas, con la finalidad de que queden convencidas de las bondades de los productos y de ninguna manera quede dañada la imagen de la marca en particular.
Expresó que, definitivamente, ningún distribuidor ofrecería al público ningún suplemento alimenticio en el cual no tuviera la confianza, misma que se logra primeramente mediante el autoconsumo a nivel personal y con la propia familia, incluyendo menores de edad. Dijo que esa es la base del negocio, en el que se exige trato personalizado, de tal manera que se pretende a toda costa ejercer la venta de ese tipo de productos sin problemas, ni mucho menos la muerte de algún cliente.