Solamente restan ajustes para dar paso a la licitación de la obra y la gestión de financiamiento
Facundo Bartolo Salazar
Será una realidad el proyecto de riego en beneficio de 2 mil hectáreas distribuidas en diferentes ejidos de la zona, pues si bien es cierto que se siguen actualizando datos diversos relacionados con la tenencia de la tierra y otros rubros, dicho proyecto está aprobado por la Comisión Nacional del Agua (Conagua), restando gestionar también las anuencias para el cruce de vías de comunicación, mismas que se deben solventar, informó Luis Victoria Moreno, presidente del Comité Regional Campesino.
Insistió en que, “pese a las versiones malintencionadas de personas que están siempre en contra de todo y a favor de nada, está aprobado el 80 por ciento de la documentación relacionada al ambicioso proyecto de riego”. Reconoció, no obstante, que es necesario solventar todas las exigencias dela Conagua, de lo cual se está encargando quien lleva esos trabajos, la ingeniera Mariela Graciano Pérez, entre las cuales se contemplan también las anuencias para cruce de carreteras estatales y federales, pues indicó que en Piedrilla y Cañizo se darán esos casos por el paso del ducto, de la misma manera que en El Diamante-Balsas de Agua.
Victoria Moreno aseguró que una vez realizados todos los ajustes necesarios, se gestionará la carta resolutiva, misma que dará la pauta para licitar la obra y en forma paralela será posible solicitar financiamiento para tecnificar las parcelas de cítricos. Lo anterior sabiendo que sería iluso pensar que los ejidatarios tengan la capacidad de tecnificar diez hectáreas, pero bien pudieran iniciar con tres o cuatro, tomando en cuenta que el costo por hectárea para el enmanguerado, las pipetas y demás material para implementar el riego.
Especificó que para esa tecnificación “las dependencias otorgan recursos a fondo perdido, de tal forma que los beneficiarios solamente aportarán unos 15 mil pesos por hectárea, a pagar en cinco años, recursos otorgados, ya sea por FIRCO y Financiera Nacional”. Consideró que con tales avances, no se deben escuchar versiones malintencionadas que definitivamente pueden retrasar las gestiones, siendo inevitable que algunos productores decidan dejar de participar, por desconfianza, situación que implica hacer nuevos ajustes en lo que se refiere al padrón de beneficiarios del proyecto de riego.
Recordó que desde 1999 inició el proyecto, con los estudios con costo de 2 millones de pesos fueron realizados y financiados por la propia Conagua, dependencia que se llevó tres meses en trabajos de levantamiento topográfico. Comentó que a raíz de ello se logró la configuración definitiva del proyecto de riego, a través de cárcamos de bombeo y electrificación por casetas. Señaló que a partir de ahí se dieron retrasos relacionados con impacto ambiental, los cuales fueron superados, en virtud de que, en lugar de derribar árboles, se tendrán que proteger pues el proyecto de riego estará enclavado en una zona eminentemente citrícola.