Como una lección de mesura, ante las voces que se pronunciaban por un desalojo violento
Facundo Bartolo Salazar
En días pasados, militantes de Antorcha Campesina levantaron el plantón que mantenían en las cercanías de la Secretaría de Gobernación en la Ciudad de México, donde participaron integrantes de la organización en esta región, al igual que de todo el país, no obstante, eso no significa que los antorchistas desistirán de sus exigencias al gobierno, señaló Hugo César Fernández Hernández, representante municipal de Antorcha Campesina.
Explicó que “las principales exigencias del plantón de Antorcha Campesina son justicia, educación de calidad y acceso al desarrollo social, y si ese movimiento fue levantado, fue para no arriesgar a los compañeros a un desalojo violento de las fuerzas policíacas, en virtud de las exageradas quejas de comerciantes que solo ven sus propios intereses”. Apuntó que esas exigencias fueron planteadas desde hace mucho tiempo a la Secretaría de Gobernación, mediante un desplegado debidamente provisto de argumentos y datos sólidos.
Sin embargo, manifestó que la dependencia no ha dado respuesta positiva a las demandas de los antorchistas, sino que, por el contrario, se ha desatado una tupida campaña de ataques mediáticos contra el plantón instalado desde hacía cuatro meses. Añadió que fueron los dirigentes de comerciantes ubicados apenas en dos cuadras que ocupaba el plantón, quienes exigieron a la Secretaría de Gobernación que fuese levantado el plantón, con las medidas que fuesen necesarias, entendiéndose ahí el uso de la fuerza pública.
Al destacar que Antorcha Campesina es una organización pacífica, Fernández Hernández mencionó que fue tomada la decisión de levantar el plantón, pese a que no ha sido resuelta petición alguna de la organización por parte de la Secretaría de Gobernación. También reiteró que de esa manera los integrantes de esa organización no fueron expuestos a una golpiza o la cárcel.
Comentó que el gesto respetuoso de la organización fue una lección de mesura, sobre todo ante las voces que se pronunciaban por un desalojo violento, pese a que siguen vivos los reclamos de solución al secuestro y asesinato de don Manuel Serrano, padre de la alcaldesa de Ixtapaluca, y al homicidio de 21 personas en la comunidad indígena de Yosoñama. Habló también de los niños y padres de familia de Michoacán, que no pueden incorporarse al Programa de Escuelas de Tiempo Completo, porque autoridades en conveniencia con la CNTE violan la ley.
