Acoso hasta a los neveros y vendedores de cacalas, protegiendo a foráneos
Facundo Bartolo Salazar
Al parecer los comerciantes foráneos tienen más privilegios que los locales, quienes resisten en forma permanente los embates de la economía, ofreciendo productos a buen precio en beneficio del público consumidor, pero resulta que las autoridades de comercio se dedican a acosar hasta a los neveros y vendedores de cacalas que son de Martínez de la Torre, y en contraparte, brindan todas las facilidades para que se instalen comerciantes de fuera, incluso en el Parque José María Mata.
Comerciantes de esta ciudad opinaron que es una burla el hecho de que las autoridades los traten de esa manera, cuando deberían tener cierta preferencia, sobre todo si se trata de ocupar espacios del primer cuadro de la ciudad, lo cual supuestamente estaba prohibido, conforme a acuerdos tomados en administraciones municipales anteriores. Comentaron que si el parque central se va a utilizar para actividades comerciales, entonces los locales deberían contar también con sus espacios, o por lo menos deberían ser colocados en el malecón a orillas del Río Bobos, siendo esa una buena opción para dar vida a esas áreas.
Los quejosos insistieron en que no es justo que lleguen comerciantes foráneos a llevarse el escaso circulante que existe en la ciudad, con todas las facilidades, mientras que los locales siguen en sus espacios restringidos para buscar la manera de ganarse la vida. Manifestaron que si de tolerancia se trata, las autoridades de comercio deberían darles permisos para realizar sus actividades en el primer cuadro de la ciudad, por lo menos los fines de semana, con el fin de recuperar en parte las ventas que no pueden llevar a cabo durante toda la semana.
Señalaron que no es posible que hasta el momento las autoridades no hayan cumplido con su compromiso de llevar a cabo operativos para detectar y sancionar a comerciantes foráneos en el primer cuadro de la ciudad. Reiteraron que, definitivamente, resulta inequitativo el trato que reciben los comerciantes locales, cuyas cuotas quizá no se comparan con las que pagan los que llegan de otras ciudades.
Confiaron en que la situación mejorará, pero contemplaron la posibilidad de reunirse nuevamente con el alcalde para abordar esa problemática que afecta la economía del comercio local, que hace aquí sus contribuciones y compras diarias, mientras que los foráneos solamente llegan a llevarse el dinero a otras ciudades y estados del país.
