Álvaro Guerrero
Taxistas de Martínez de la Torre se encuentran molestos por la forma en que está realizando los operativos la Delegación de Transporte Público, puesto que se sienten acosados por los uniformados, ya que continuamente los están infraccionando por cualquier motivo.
Un taxista expuso que, “ya van varias veces que me infraccionan los de Transporte Público, pero no cometo ninguna infracción como aseguran ellos, ahora hasta nos graban con sus celulares, según para que veamos que estamos cometiendo las infracciones, que son órdenes del delegado”.
Los choferes dijeron que desconocen esa forma de operativos que están haciendo los agentes del transporte público y qué tanto se encuentra permitido realizar ese tipo de acciones grabando a cada unidad de transporte, pues podrían ser utilizados para extorsionarlos continuamente.
Argumentaron que en ocasiones se esconden en lugares estratégicos para multar a cualquier conductor o en su caso pedir la mordida, ya que los lugares donde se ocultan siempre son las partes de afuera de la ciudad como en el puente Martínez II rumbo a Misantla y la avenida Zaragoza.
Indicaron que como es temporada alta de trabajo para los ruleteros, los uniformados buscan sacar lo más alta posible su mordida, ya que existen varios compañeros que están dentro de organizaciones y violentan de alguna manera u otra el reglamento sin ser infraccionados.
Tal es el caso de los taxistas que realizan viajes hasta con cinco pasajeros, y se preguntan por qué ellos no son infraccionados por exceso de pasaje, sabiéndose que dentro del reglamento se encuentra la capacidad de usuarios.
Aseguraron que existen varias unidades que incluso no traen las placas de circulación, y se encuentran trabajando los taxis de esa forma, por lo que no saben a qué se deba que no sean multados como otros.
Precisaron que han intentado dialogar con el delegado, sin embargo siempre se ha negado a atender a los concesionarios de taxis, aseverando que esa actitud no debe tenerla el encargado de esa área y que solamente quiera atender a los organizados, fomenta las malas opiniones.
