* Desactivados desde hace varios años
* Taxistas deben de portar su tarjetón, a fin de identificarlos
Brenda Pérez Aguilar
“Pese a que siempre ha existido inseguridad en el municipio, hoy trabajadores del volante tienen que extremar mayores precauciones, por ello siempre les decimos que ya no vayan de noche a las comunidades o rancherías”, destacó el concesionario de taxis, Agustín Hernández Moguel, quien además agregó que hasta en las mismas orillas de las colonias de la ciudad, los han asaltado.
Un punto muy importante en este tema, -destacó-, por lo que próximamente tendrán un acercamiento con el comandante de la quinta región de la Secretaría de Seguridad Pública, es para pedirle que los apoyen activando los módulos de seguridad que se encuentran en las entradas y salidas de la ciudad, ya que desde hace más de tres trienios se encuentran abandonados .
“Tenemos el que va para Pedernales, Diamante-Balsas de Agua, Misantla, salida a San Rafael, Tlapacoyan, entre otros más, porque en los lugares despoblados pueden asaltar al chofer y golpearlo si bien le va”, mencionó.
En estos primeros tres meses, -recordó-, han sido varios los taxistas víctimas de la inseguridad, uno de ellos falleció por la imprudencia de un ebrio conductor, en los primeros días de enero y desgraciadamente su caso no se ha resuelto, lamentablemente los asaltos están a la orden del día, los golpean y les quitan la cuenta.
Remarcó que a fin de identificar a los trabajadores del volante, todos deben de traer un tarjetón en el espejo de la unidad, es decir que se encuentre a la vista del público, ya que anteriormente entre los mismos taxistas se conocían, porque eran alrededor de cien, sin embargo ahora son más de mil unidades, por lo que ya no se conoce a todos los choferes.
Así mismo, pidió a todos los trabajadores del transporte público que tengan mucho cuidado con las personas que suben a las unidades y no levanten a cualquiera en la madrugada en las colonias apartadas, en donde muchas veces no tienen ni alumbrado público, porque traen la torreta encendida y es cuando aprovechan los amantes de lo ajeno.