Se estima que en México existen 250 mil personas con la enfermedad
Rocío Ramírez
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha declarado oficialmente el 21 de marzo como el Día Mundial del Síndrome de Down, una enfermedad que siempre ha existido en la condición humana y que, sin embargo, aún sufre de mucha discriminación por falta de información.
La finalidad de la resolución, alienta a los países para que adopten las medidas necesarias y tomen conciencia respecto de los derechos, la inclusión y el bienestar de las personas con síndrome de Down.
Este síndrome es una alteración genética, ocasionada por la presencia de un tercer cromosoma en el par 21, por tal motivo esta conmemoración se llevará a cabo el 21 del tercer mes de cada año, (21/3).
El médico, Claudio Díaz explicó que entre las personas con síndrome de Down existe una gran variabilidad en su desarrollo, incluso, es posible que las diferencias entre esta población sean mayores que las que existen entre la población general.
“Aunque se conocen algunas características que se presentan comúnmente en las personas con síndrome de Down, se debe tener cuidado de no hacer juicios o aseveraciones absolutas, ni generalizaciones sin fundamentos que puedan provocar confusión”, explicó.
Informó que el síndrome de Down es el más común de los defectos genéticos del ser humano, no tiene cura pero con una adecuada atención, las personas que lo padecen pueden desarrollar algunas capacidades y tener una vida saludable y con calidad.
En México, se calcula que aproximadamente existen 250 mil personas con Síndrome de Down, sin embargo con tratamientos especiales la esperanza de vida para ellos es más o menos de 55 años y la mayoría pueden integrarse a la sociedad fácilmente, expresó Díaz.
Afecta a todas las razas y niveles económicos por igual y según datos de fuentes no reconocidas, se calcula que aproximadamente uno de cada mil bebés nace con este trastorno.
Respecto a la inteligencia de las personas con Down, indicó que se caracterizan por una inteligencia por debajo de la media que se define como un Cociente Intelectual (CI) de 70 o menos, que impide que la persona aprenda correctamente.
“Esta manifestación en ocasiones se empieza a notar cuando los niños acuden a la escuela, sin embargo desde que nacen presentan algunos rasgos físicos que los caracterizan”, indicó.
Por encima de estereotipos y coincidencias aparentes se encuentra una rica variedad de temperamentos, explicó que pueden presentar diferentes características de personalidad.
“Suelen ser sociables, afectuosos y presentar menor capacidad para inhibirse, pero también les gusta colaborar en las tareas de la casa, cuando se les enseña y se les permite participar, en ocasiones, tienden a presentar conductas persistentes y resistencia al cambio, así como escasa iniciativa”, comentó.
Es un problema complejo dijo, ya que cerca de 30 a 50 por ciento de los bebés con el Síndrome de Down, también tienen defectos congénitos del corazón y muchos presentan deficiencias en sus capacidades visuales y auditivas, además de otros problemas de salud.
“La gravedad de todos estos problemas varía enormemente de caso a caso, pero atendidos adecuada y oportunamente los niños y niñas pueden desarrollarse adecuadamente física y socialmente”, expresó.