17 de Noviembre de 2024
 

Nadie detiene el saqueo de piedra y grava en el Río Bobos

* Graves daños ocasionados al cauce de ese cuerpo de agua, así como a las especies acuáticas de los alrededores

Facundo Bartolo Salazar

Nadie detiene el saqueo de piedra y grava en el Río Bobos, siendo esa una situación que persiste de manera ilegal, pues la mayoría de quienes realizan esa actividad no cuentan con los permisos correspondientes, quedando impunes los graves daños ocasionados al cauce de ese cuerpo de agua, así como a las especies acuáticas y plantas de los alrededores, señaló Rubén Cortés Cortés, presidente de Pescadores Protectores del Medio Ambiente.

Advirtió que “lo único que lograrán esos materialistas ambiciosos con la extracción desordenada e ilegal de pétreos es secar definitivamente el Río Bobos, pues a lo largo de la cuenca se observan esas actividades sin que intervengan las autoridades encargadas del medio ambiente, y solo falta que exista complicidad entre ellos”. Reconoció que si es riesgoso hacer señalamientos hacia esas personas que manejan acciones ilegales que implican miles de pesos, pero desafortunadamente, alguien tiene que levantar la voz para defender lo poco que queda para admirar de la naturaleza, y que pronto podría acabar por la falta de conciencia.

Comentó que es deseable combatir el saqueo de pétreos a la par de la contaminación que constantemente provoca mortandades de peces y otros animales acuáticos, siendo eso responsabilidad de las dependencias encargadas del cuidado al medio ambiente. Lamentó que en ese contexto no se observe suficiente seriedad para abordar esos asuntos que en el futuro serán de vital importancia también para la sobrevivencia de los seres humanos.

Informó que, por su parte, los pescadores no quitarán el dedo del renglón, y continuarán con la lucha que iniciaron hace ya casi dos décadas, sin que se hayan dado hasta la fecha avances significativos en ese rubro. Opinó que es necesario dejar de caminar en círculos y presionar a las autoridades, no solamente los pescadores, sino todos los ciudadanos en su conjunto, con la finalidad de rescatar lo que alguna vez fue una fuente de sustento y de vida en general.


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