* Existe talento para que a través de la programación y demás recursos sea posible realizar actividades de una manera más rápida y mejor
Facundo Bartolo Salazar
Si bien es cierto que en la actualidad existen juegos y redes sociales a través de celulares y computadoras, en los que muchos jóvenes pasan tiempo, sin aprovechar o producir algo en concreto, es posible orientarse hacia opciones como la programación de computadoras, lo cual permite a los interesados enfocarse a cualquier actividad que les agrade, resolviendo problemáticas diversas, precisamente como si fuese un juego que es posible disfrutar, expuso Alexis Tapia Pazos, estudiante de sistemas computacionales del Tecnológico de Martínez de la Torre.
Informó que “el pasado fin de semana un equipo del Instituto Tecnológico de Martínez de la Torre participamos en un concurso de nivel internacional en la Universidad La Salle de Cuernavaca, en el cual la temática fue ocupar el lenguaje de programación y nuevas tecnologías para resolver problemas de la vida diaria, con el uso de computadoras y demás instrumentos que permiten hacer las cosas mejor y en una forma más rápida”.
Explicó que, siendo la primera vez que su equipo participa en un concurso de ese tipo, compitieron en la categoría A o nivel básico, en la que conjuntamente con Silvia López Arcos y Arlette Méndez Hernández, obtuvieron el tercer lugar, entre escuelas de diferentes países.
Tapia Pazos destacó que lo anterior es muy importante, tanto para el Tecnológico, como para Martínez de la Torre, y gracias al apoyo de los profesores de la institución y el esfuerzo de todo el equipo, queda en alto el nombre de esta ciudad, donde queda demostrado que hay gente que trabaja y sabe hacer bien las cosas.
Reconoció que aquí hay mucho talento para programación e incluso robótica, aun cuando algunos jóvenes toman los recursos tecnológicos como vicio y juego, es claro que si hay quienes utilizan los aparatos para actividades de beneficio. Insistió en que a los jóvenes les gusta estar comunicados, pero es necesario administrar el tiempo, lo mismo para divertirse, pero también para estudiar y trabajar, creando y produciendo algo.
