- Elementos ministeriales le siguen los pasos a la pseudolíder María del Carmen Vázquez Bonilla
Facundo Bartolo Salazar
Martínez de la Torre, Ver.- Están a punto de ir a la cárcel los invasores del predio Río Chico, para lo cual elementos de la Policía Ministerial siguen los pasos de María del Carmen Vázquez Bonilla, quien es la pseudolíder que encabeza a un grupo de personas que en forma ilegal, se están apoderando de un número considerable de lotes en ese lugar, indicó Rafael Hilario Martínez, apoderado legal del citado predio.
Informó que “de un momento a otro se espera la captura de María del Carmen Vázquez, apodada La Chiltepina, quien hábilmente se ha ocultado en viviendas de Río Chico, pero que tendrá que responder junto con sus cómplices por los delitos que están cometiendo, principalmente invasión y despojo”.
Lamentó que haya incautos que creyeron en las palabras de Vázquez Bonilla, quien no está facultada para entregar lotes, ni recibir dinero a cambio de ello, pero señaló que desafortunadamente, quien haya realizado algún convenio con la pseudodirigente perderá los pagos que le haya entregado.
Es por ello que hizo un llamado a los interesados en algún lote para que no se dejen sorprender por La Chiltepina y sus seguidores, pues la única manera legal y segura para hacerse de un terreno en Río Chico es a través de un convenio que los posesionarios están firmando con el propietario, Armando Ahiza Dávalos, a quien se le harán los pagos a través de una cuenta bancaria.
Rafael Hilario dejó en claro que nadie más manejará dinero por ese concepto, y quien lo haga está cometiendo un delito, pues todos los colonos se deben apegar a las reglas ya establecidas.
Adelantó que serán verificados conforme a la lista correspondiente los lotes del predio Río Chico con sus posesionarios legales, con el plano en la mano y con el respaldo de las autoridades. Y quien se encuentre ocupando un terreno ilegalmente, deberá desalojarlo, puesto que tendría que contar con su convenio firmado para tener posibilidades reales de convertirse en propietario.