Álvaro Guerrero
Martínez de la Torre, Ver.- Las organizaciones reglamentadas temen que la Sagarpa y Sedarpa les puedan cerrar las puertas para realizar gestiones en favor de los productores, todo esto debido a la denuncia que hicieron públicamente campesinos en la ciudad de Xalapa, donde dieron a conocer que organizaciones patito o fantasma estuvieron acaparando programas, y que estas no hicieron la entrega de los recursos al sector agrícola, lo que les estaría afectando por culpa de esas organizaciones, y cerrando las puertas a las que se encuentran reglamentadas. Por ello, piden se les pongan un sello definitivo a éstas, manifestó Alejandro Tapia González, presidente de la asociación civil Mujeres y Hombres en Busca de una Vida Mejor.
“Se debe terminar con esas organizaciones (patito), deben de quedar fuera, deben poner un candado, y existen varios candados pero especialmente a esas organizaciones que no tienen la facultad ni la documentación, ni tienen su trayectoria en beneficio de la población”.
Espera que las próximas autoridades puedan frenar esta situación que afecta a las organizaciones reglamentas como de sus beneficiados, pues les puedan estar exigiendo a las agrupaciones mayor documentación para su acreditación, “con el nuevo gobierno, me imagino que se realizarán las modificaciones de los recursos que se vienen otorgando, las dependencias van a ser cambiadas igual que las direcciones, sentimos que los nuevos titulares que van estar al frente deben hacer un programa donde solamente sean beneficiadas aquellas organizaciones que están reglamentadas o por lo menos tengan clave CLUNI”.
Lamentó que las organizaciones al no obtener el recurso de las autoridades de cualquier índole de gobierno, tengan que realizar manifestaciones o toma de oficinas. Varias organizaciones optan por presionar al titular para obtener un recurso extra, que al final de cuentas se les quedan a los que orquestaron la manifestación, pues al ser favorecidas estas organizaciones, empiezan a repartir en primer lugar a sus familiares o a sus allegados, mientras tanto al necesitado lo dejan al final con las migajas o sin recibir el apoyo, lo que tampoco debería existir, expresó.
