- Será muy difícil que las diversas autoridades entren a la cárcel
Facundo Bartolo Salazar
Martínez de la Torre, Ver.- La Ley Anticorrupción será una ley “a modo” en la que los legisladores van a buscar que quienes están en el poder, no precisamente serán inmunes, sino que serán lo más intocables posible, de tal forma que, para aplicarles la ley, siendo justa y realmente de mano dura, sería interesante ver tras las rejas a presidentes municipales, diputados y gobernadores, señaló Federico Pérez Gómez, en su carácter de ciudadano observador y crítico.
Insistió en que “va a ser muy difícil que todos estos ejecutivos entren a la cárcel, pero hay muchas autoridades más; los delegados de tránsito, de transporte, las corporaciones policiacas, el ejército, la armada, la Policía Federal, donde hay mucha corrupción, pues incluso forman equipos para asaltar”. Pregunto entonces, ¿es posible realmente hacer una ley justa, de mano dura y que haya autoridades que la sepan y la puedan aplicar en forma de justicia?
Pérez Gómez opinó que la Ley Anticorrupción en todo caso refleja solamente buenas intenciones políticas para que las vea el pueblo y nada más. Consideró la posibilidad de que apliquen esa ley a los particulares, pues si alguien fuese proveedor de algún ejecutivo, llámese materiales, mano de obra o equipos, y le encuentran una “travesura” es necesario determinar a quién sancionarán: ¿A quien mató la vaca?, ¿A quien le agarró la pata? O a ambos.
Comentó que en caso de prosperar la citada ley, será perfectible eternamente, tal como ha sucedido con la ley electoral, que lleva 20 años funcionando y aún es posible hacerle mejoras. Relató que en su momento el Código Electoral permitió que un partido permaneciera en el poder 70 años, y fue hasta 1997 que fue creado el nuevo código, siendo evidente que aún le quedan lagunas, para lograr una democracia verdadera en México.
