Algunos han sufrido hasta ocho meses de retraso en sus apoyos
Facundo Bartolo Salazar
Todo un calvario viven beneficiarios del programa 65 y Más de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), pues resulta que después del cambio en el gobierno federal todos los trámites se han vuelto más confusos, especialmente el cobro de sus apoyos, situación que tiene al borde de la desesperación a esas personas de la tercera edad, quienes en su mayoría esperan dichos recursos para solventar gastos básicos como la alimentación, e incluso el pago de servicios como la energía eléctrica.
Son innumerables los casos en que los viejitos ya no saben cuándo recibirán sus apoyos, siendo ejemplo de ello don Alejandro, quien comentó que a pesar de todo él ha sido afortunado, pues está esperando su pago bimestral desde el pasado mes de febrero, mientras que otros apenas están recibiendo lo que corresponde a ese bimestre, dudando que les llegue su dinero de marzo y abril.
Sin embargo, existen beneficiarios del programa 65 y Más quienes sin explicación alguna, han pasado hasta ocho meses sin recibir sus apoyos, precisamente desde que fueron suspendidos a causa del pasado proceso electoral federal, lo cual refleja una profunda falta de capacidad y sensibilidad de los gobiernos y los funcionarios de la Sedesol, quienes definitivamente no tienen ni siquiera una idea de las penurias que tienen que pasar esas personas de la tercera edad para sobrevivir, sobre todo cuando sufren del abandono de sus familiares.
Don Alejandro refiere que mientras espera sus recursos del 65 y Más tiene que sobrevivir pidiendo prestado a sus conocidos, pues es claro que a su edad, aun cuando no sufre grandes problemas de salud, ya le resulta muy difícil obtener un empleo que le permita ganarse algunos pesos. Comentó que esa es la situación de muchos otros, quienes se cansan de ir a revisar el cajero automático para verificar si ya les depositaron algo. Añadió que la situación empeora cuando los viejitos ya no pueden valerse por sí mismos y sus familiares no los apoyan adecuadamente, ya sea para hacer sus cobros, o bien, para llevarlos a comprobar supervivencia, un trámite que de ser pasado por alto, también es motivo de suspensión de los apoyos, en ocasiones de forma definitiva.
Por todo lo anterior, don Alejandro y otros beneficiarios del mencionado programa hacen un llamado a las autoridades correspondientes para que tengan a bien avisarles por lo menos de periodos definidos en que pueden efectuar sus cobros y también comprobar supervivencia, pues de lo contrario, el programa 65 y Más representará para los abuelitos un problema, en lugar de una ayuda.