No será un desfile, sino una marcha exigiendo respeto a los derechos laborales
Reformas siguen lastimando a la clase obrero-trabajadora del país
Manifestarse de manera pacífica es lo único que les queda, pues temen represalias
José Miguel Bautista Hernández
Representantes de la clase trabajadora aseguran que el próximo desfile del primero de mayo, será una oportunidad para demostrar la inconformidad que impera en el pueblo sobre todo tras la situación económica del país, así también por las reformas que se han aprobado, las cuales consideran que vienen en detrimento de la economía y estabilidad de las familias mexicanas.
Es por ello que aseguran que más que un desfile conmemorativo será una marcha de protesta ante esta situación, la cual aseguran es cada vez más difícil.
El magisterio se hará escuchar
Un acontecimiento que estará marcado por el descontento generalizado será este primero de mayo, y es que “no hay nada qué festejar, sino por el contrario es una fecha que servirá para marchar exigiendo que se respeten los derechos laborales de todos”, refirió la maestra Azucena Rodríguez Vázquez, secretaria general de la delegación D-I 88 preescolar de la delegación 56.
La maestra informó que en primer lugar lo que se busca es que haya libertad de expresión, “que nos dejen expresar lo que pensamos, lo que sentimos porque este primero de mayo es un 1º de mayo muy especial, después de haber vivido tantas reformas y más aún la mal llamada “reforma educativa”, es la que nos lleva a reflexionar acerca de las condiciones en las que pretenden que nosotros laboremos y estamos pensando que este primero de mayo no tenemos nada qué celebrar, no es una celebración como en años anteriores en los que se desfilaba con uniforme y pancartas de agradecimiento o con alguna que otra petición para poder mejorar las condiciones laborales de todos, pero este año es una exigencia, pues no será un desfile sino una marcha para exigirles nuestros derechos que están siendo violentados con estas reformas”.
Hizo hincapié en la reforma educativa, pues en ella esta emergida la Ley del Servicio Profesional Docente que hace algunos días fue aprobada en el Congreso, en este caso los diputados estatales aprobaron la llamada armonización, “que si bien si tiene algunas cosas que benefician un poco a los docentes, o al menos que aligeran un poco el daño, no lo es del todo, porque siempre hemos pensando que si al gobierno le interesa mejorar la calidad educativa no es violentando los derechos de los trabajadores sino al contrario, debe favorecer la formación profesional de los compañeros y no echarnos la culpa de todo lo que está sucediendo en cuanto a los resultados educativos”, explicando que dentro de la educación son varios los factores que intervienen para que se logre y se obtenga la calidad deseada.
Cuestionada sobre lo que se espera en el desfile conmemorativo, aseveró que se requieren apoyos y no culpables, por lo que este 1º de mayo habrán de manifestar su inconformidad a los líderes sindicales, puesto que fueron elegidos para defender estos derechos, “y hoy se observa que forman parte del equipo de gobierno, son los que les ayudan a mantener este tipo de situaciones, a callar a los trabajadores, por lo que la base es un monopolio, y el representante en lugar de que luche al frente de nosotros, solo negocia para beneficio propio y de sus allegados”, refirió la entrevistada.
La secretaria general mencionó que se espera la participación de todos los compañeros para manifestar el repudio hacia esas leyes, considerando un retroceso a las conquistas laborales, ejemplificando que cuando los trabajadores están bien dan mejores resultados.
“Hoy después de todo el movimiento magisterial que se tuvo hace algunos meses, estamos en unas condiciones muy particulares, estamos divididos en el sentido de que existen docentes que están en desacuerdo, siendo muchos los que no están de acuerdo en lo que está pasando y quisieran protestar, pero por temor a que no les sean concedidos algunos derechos o condicionados por los líderes sindicales no lo expresan, y en su mayoría los compañeros están en esa condición; y esta la otra parte que dice abiertamente que está del lado de los líderes sindicales, y los que están es porque tienen mucho que agradecerles, pues los puestos de supervisores o jefes de sector que tienen han sido otorgados por ellos y no por su capacidad”, señalando ‘amigazgos’ y ‘compadrazgos’, “y está la otra parte que manifiesta lo que siente y piensa sin temor, porque se tiene que construir la democracia dentro de los sindicatos” explicó.
Clase obrera, en total descontento
Un primero de mayo con serias manifestaciones se dará en próximas fechas, y es que también la mayoría de la clase obrera no está de acuerdo con las llamadas reformas, en especial con la “reforma hacendaria” que tantos dolores de cabeza sigue generando entre comerciantes y trabajadores de los distintos rubros comerciales, aseguró Gerardo Zapata González, secretario general de la federación regional CROC.
“Los millones de trabajadores del estado apoyamos la reforma hacendaria, lo único que pedimos es que se tome en cuenta a los trabajadores no asalariados para que les cobren su impuesto sin tanto protocolo, que lo paguen basado en su preparación, porque si pagan impuesto acorde a su situación no tienen problemas, pero si les ponen mucho papeleo genera descontrol, ya que la mayor parte de esta gente son personas con un salario magro, y que están dispuestos a pagar los impuestos pero simplificado y no teniendo que contratar a contadores, ni estar comprando aparatos para dar facturas electrónicas, es lo que pide la gran mayoría de comerciantes de distintos giros comerciales, por lo que los derechos laborales en vez de festejarse debemos protestarlo”, expresó el dirigente.
También consideró como un absurdo engaño las llamadas conquistas laborales, pues estos privilegios solo son para unos cuantos, por lo que dijo que “estos trabajadores piden que se haga un estudio bien hecho y que el trabajador no asalariado sea considerado al momento de que va a pagar sus impuestos, porque no les alcanza para pagar a Hacienda y a los contadores o dejan sin comer a su gente”, lamentó.
También lanzó una petición para los trabajadores de base, pues expresó que ya no debe haber más transas, “además si se pudiese reducir los salarios de grandes funcionarios, que se quiten porque es una burla para el trabajador, y que cuando se acuerden aumentos sean basados en los incrementos de los insumos y sobre todo basados en la canasta básica y no que den incremento al salario que lo pulverice cualquier alza de cualquier artículo”, indicando así su total desacuerdo en este sentido.
Incremento salarial, una burla
Cuestionado sobre los aumentos a los salarios de manera reciente, los consideró como una burla, engaño o una simple pantalla, ejemplificando que si se le aumenta 2.50 al salario mínimo y le aumentan al frijol 5 pesos, están pulverizando en un solo artículo de la canasta básica el aumento al salario, refiriéndose que se consumen entre 50 o más artículos por familia, y por más que se desempeñe de manera correcta las funciones en un puesto o más aun doblando turnos, no se puede conseguir un modo decente de vida con los mismos, ya que cada vez más está por las nubes la canasta básica, provocando esta situación la generación de más delincuencia en todo el país.
Una falsedad, la libertad de expresión
Cuestionado sobre la posible manifestación en el desfile del 1º de mayo, el dirigente expresó que se debe desfilar de manera pacífica, pues la famosa libertad de expresión no existe o es letra muerta, “porque aunque digan que ese día es de nosotros, haces algo que no le guste a la autoridad y te mandan a detener, aquellos que lo han tratado de hacer los han detenido, los han procesado o encerrado y ahí si hay justicia, pero en el incremento al salario estamos ‘fritos’”, acusó.
Calificó como algo extraño el hecho de que diversos líderes sindicales no levantaron un dedo y no pusieron siquiera una traba en favor de sus agremiados, por lo que refirió estar de acuerdo en las reformas siempre y cuando se apoye a los no salariados, ya que algunos solo llegaron hasta el segundo grado de estudios, y por ello se ven en la obligación de convertirse en mecánicos, hojalateros, eléctricos, vendedores ambulantes que buscan la manera de ganarse la vida honradamente y de todo eso se burlan al dar una autorización o reforma de ley que lejos de beneficiar, transgrede los derechos laborales de todos.
