* A pesar de que eso ya se ha hablado desde hace tiempo, esperando que el gobierno haga algo al respecto, nunca ha pasado nada
Facundo Bartolo Salazar
Es prácticamente imposible el control de precios del limón, en todo caso de la naranja y las demás variedades de cítricos, pues a pesar de que eso ya se ha hablado desde hace tiempo, esperando que el gobierno haga algo al respecto, nunca ha pasado nada, y los productores siguen en manos de quienes manejan las subastas y demás canales de comercialización, incluyendo a los intermediarios o “coyotes”, señaló Gaudencio Méndez Ramírez, citricultor.
Reconoció que “nosotros como productores siempre esperamos que nos vaya mejor en la venta de nuestra naranja, limón, mandarina y demás, pero nosotros no hemos podido hacer nada con los precios que nos pagan, y el gobierno no hará nada, y por eso es claro que ese no es el camino para defendernos”. Apuntó que los gobiernos desde hace años ni siquiera han frenado de alguna manera la entrada de limones foráneos para evitar que los precios caigan en esta región, y peor sería en la cuestión de los precios, porque señalo que todo se justifica por la oferta y la demanda de la fruta.
Méndez Ramírez dijo que, a final de cuentas, ya se ha hecho notar que allá en otros países como Estados Unidos el precio del limón persa nunca baja, pero manifestó que aquí localmente pueden los compradores bajar los precios cuando quieran. En ese sentido, hablo de los intermediarios o “coyotes”, quienes se llevan grandes ganancias a costillas principalmente de los productores, pero también de sus patrones.
Consideró necesario que los citricultores cuando menos llegasen a organizarse tarde o temprano para suspender los cortes de la fruta en los momentos en que paguen precios muy bajos, pues esa sería la única manera de ejercer presión para que los pagos mejoren. Comentó que, de ahí en adelante, solo restaría pedir a los gobiernos los apoyos necesarios para mitigar los costos de producción, o para dar ellos mismos valor agregado a su fruta.