JUAN DAVID CASTILLA
XALAPA, VER.- En Veracruz ha sido notoria la presencia del Ejército Mexicano sobre todo cuando ocurren hechos violentos que alarman a la población; sin embargo, algunas organizaciones civiles alertan por el abuso de la fuerza y la violación de derechos humanos por parte de los militares.
Recién se informó que más de 300 elementos del Ejército Mexicano arribaron a Tuxpan tras el hallazgo de cuatro cuerpos en el bulevar Independencia, el pasado sábado 2 de marzo.
De acuerdo con un nuevo análisis realizado por las organizaciones Data Cívica e Intersecta, las fuerzas armadas dejan 4.4 muertos por cada herido cuando participan en un enfrentamiento en este sexenio, mientras que las policías, 2.7.
El informe Amadas y letales, segunda parte del proyecto Con Copia Oculta, exhibe y compara el abuso de la fuerza de las corporaciones de seguridad castrenses y civiles.
Se cuestiona con evidencia que los militares sean mejores para encargarse de la seguridad pública y por eso tengan mejor aceptación en la sociedad, argumentos utilizados en la más reciente iniciativa de reforma para militarizar definitivamente a la Guardia Nacional y la seguridad pública.
En general, en enfrentamientos con autoridades el número de personas civiles fallecidas es mayor que el de heridas, lo cual refleja que su uso de la fuerza no es conforme lo que dice la ley, que establece que debería ser el último recurso cuando enfrentan a presuntos delincuentes. Es decir, que más bien tiran a matar.
“Si un civil fue afectado en un enfrentamiento donde estuvo presente la policía estatal, tiene tres veces más probabilidades de haber fallecido que de haber sido lesionado. El ejército, por el contrario, está presente en menos enfrentamientos que en sexenios anteriores. No obstante, si una persona fue afectada en los enfrentamientos donde el ejército está presente, la probabilidad de que haya fallecido es cuatro veces mayor a que se haya lesionado”, señala el informe.
Su letalidad es también mayor si se comparan las cifras de detenidos, sobre todo si actúan solas y no en conjunto con una corporación policiaca civil: en los enfrentamientos del Ejército la letalidad es de 1.5 fallecidos por detenido, frente a menos de 0.4 cuando en ese evento estuvo presente también otra corporación.
Cabe resaltar que estos resultados se calcularon a partir de datos oficiales que el gobierno mexicano ha integrado con registros de hechos de violencia que atribuye al crimen organizado y su combate.
La primera versión la hizo pública la residencia en 2011 pero luego la eliminó, y dos versiones posteriores han sido filtraciones al Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) y a finales de 2022 tras el hackeo del colectivo Guacamaya a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).