*Encuentran dos entierros clandestinos en Carrizalillo, a una hora de Iguala
*De acuerdo con testimonios, en la zona podría haber hasta 60 cuerpos
El Universal
Chilpancingo, Guerrero
En menos de una semana, dos fosas clandestinas más fueron ubicadas por vecinos de la comunidad de Carrizalillo, Eduardo Neri, en dos puntos de terracería ubicados a un kilómetro y medio del pueblo. En esa zona, a una hora de Iguala, puede haber hasta 60 cuerpos, según denuncias que hay en la Comisaría.
El sábado pasado habitantes de Carrizalillo, comunidad que arrenda sus terrenos a la minera canadiense Gold Corp para la extracción principalmente de oro, encontraron en un punto conocido como Los Cazahuates –entre la carretera que conduce a las comunidades de Amatitlán y Tenantla– una fosa clandestina con dos mandíbulas y huesos de diferentes partes del cuerpo humano, que entregaron al Ministerio Público del Fuero Común.
En las tres fosas halladas hasta el momento sólo han ubicado restos de dos personas, huesos y cabellos.
Nelson Figueroa, comisario de Carrizalillo, guió a reporteros a los lugares donde hallaron dos nuevos hoyos con restos humanos: El Puerto y El Pedregal, puntos que ubicaron luego de que Modesto Peña Celso, presunto halcón del grupo delictivo Guerreros Unidos, les confesó en su intento de ser liberado, al igual que otros que no han podido ubicar: El Zapote y Los Maguitos.
Modesto Peña fue retenido por más de 15 horas juntos con nueve policías federales el pasado 28 de octubre, cuando –de acuerdo con la versión del comisario municipal y habitantes de Carrizalillo– éste pretendía ayudar a los efectivos a, quienes relacionan con el grupo delictivo, a detener al comisariado ejidal, Ricardo López, e incriminarlo con la delincuencia.
Ese día tuvo que intervenir la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para que tanto Modesto como los nueve policías que traían en su poder armas de grueso calibre –según los habitantes de Carrizalillo– fueran entregados a la Marina Armada de México y llevados a la delegación Procuraduría General de la República (PGR), donde rindieron sus declaraciones y se quedaron a disposición del Ministerio Público Federal.
“Creemos que vamos a encontrar más de 60 personas en dos fosas. La persona que venía con los federales (Modesto), con tal de que no le hiciéramos nada, nos confesó que había varios puntos en donde ellos (Guerreros Unidos) tiraban a sus víctimas, pero hasta el momento no hemos encontrado más que tres fosas”, dijo Nelson Figueroa.
Luego de la confesión de Modesto Peña –originario de Carrizalillo pero que junto con sus hermanos es acusado de perpetrar secuestros, extorsiones y asesinatos–, dueños de ganado que llevan a pastar sus animales han ubicado tierra removida y han avisado a la Comisaría.
Desde el lunes Figueroa esperaba a la PGR para que inspeccionaran el lugar y los ayudaran a ubicar las decenas de cuerpos que Modesto Peña confesó haber dejado en la comunidad de no más de mil habitantes, y que pertenece al Cinturón de Oro.
Hay otros puntos a dos kilómetros del pueblo donde les señalaron fosas: uno está cerca de la secundaria y otro rumbo al relleno sanitario; pero al momento, con sus picos y varillas, no han ubicado nada.
Por la disputa del territorio entre Los Rojos y Guerreros Unidos, más de 300 habitantes de Carrizalillo han huido del pueblo. La gente que vive allí asegura que son de las familias Peña Celso, quienes “sembraron terror en el pueblo”.
Hay una calle denominada del terror, donde permanecen vidrios rotos, muebles destruidos y ropa abandonada.