Por Jorge Luis Borboa
Hace unos días se dieron las elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) en Argentina para definir que partidos y candidatos de cada partido podrán competir en las elecciones generales que se darán el 22 de octubre de 2023, algo que si bien refiere a la política de un país del extremo del sur de América, es necesario analizar qué relación tiene para la región y México.
Las llamadas elecciones PASO, son una forma de determinar los partidos o coaliciones que están habilitadas para competir en las elecciones generales, además de que determina que candidato puede competir de los que se postulan por partido o coalición, algo que no siempre es entendido en otros sistemas electorales, pues en México funciona solo una elección y los procesos internos de los partidos para selección de candidatos se queda en los partidos y no se da pauta a la población para que elija el candidato de cada partido, no obstante es un proceso largo el de Argentina pues se compone de 2 o 3 etapas, siendo las PASO como la primera y primordial para seguir a las generales, que si el primer lugar no alcanza el 45% de los votos o no saca el 40% dejando al segundo lugar con más del 10% de diferencia, se irá a la segunda vuelta.
El sistema electoral argentino ciertamente es más complejo de países como Colombia, Perú, Ecuador, Brasil, Uruguay y Chile, que tienen elecciones de primera y segunda vuelta, además de ser muy diferente al de México pues solo existe una elección general, sin olvidar que se parece al de EE.UU. al tener una elección primaria pero en USA, la elección es por delegados, es decir de manera indirecta, además de ser solo una vuelta, con un Colegio Electoral, ya que en nuestro vecino del norte desde 1916 se ha consolidado el bipartidismo, solamente con unos casos de un tercero como en las elecciones estadounidenses de 1968 y 1992 respectivamente.
Con esto se pudiera pensar que las PASO en Argentina no son tan importantes pues se aplicó este modelo electoral desde 2009, pero la realidad es que esto funciona también como una especie de encuesta nacional sobre quienes son los preferidos para competir en las generales, además de existir un efecto del ganador, que llevaría una ventaja al ver que es el mas votado, los dudosos podrían hacerlo.
Ahora bien, el revuelo que causaron estas elecciones primarias, no refieren al sistema electoral argentino, sino en los resultados obtenidos por sus competidores ya que este país es conocido por adoptar una corriente política saliente del peronismo, pero que tiene una derivada llamada Kirchnerismo, pues esta se originó en el mandato de los esposos Kirchner, siendo Néstor Kirchner electo presidente del 2003 al 2007, después de la crisis del corralito en 2001, y la cesión de la presidencia por parte de Carlos Menem que una vez más competía, pues ya había sido presidente desde 1989 a 1999, pero en la primera vuelta en 2003 el ganaba por poco a Kirchner pero decidió hacerse a un lado y no seguir en la segunda vuelta, siendo Kirchner presidente y después su esposa Cristina Fernández desde 2007 al 2015.
Sin embargo, en 2015 sería electo Mauricio Macri, un político de la derecha tradicional argentina, teniendo 4 años de presidencia y que perdería la reelección en 2019, trayendo de vuelta al Kirchnerismo con Alberto Fernández y Cristina Fernández como vicepresidenta. A partir de aquí se entiende que esto seria algo parecido al bipartidismo pues son dos coaliciones, que una sería de izquierda con Unión por la Patria (peronismo-kirchnerismo) y derecha con Juntos por el Cambio.
Ahora este escenario de dos coaliciones tradicionales se rompería finalmente, algo no visto desde el retorno a la democracia argentina pues el enigmático Javier Milei, economista y político libertario, sería el ganador de las PASO con 30% de los votos el solo y con su espacio político La Libertad Avanza, dejando en segundo a Juntos por el Cambio con 28% pero con su candidata elegida Patricia Bullrich con el 17% pues su competencia en el partido era Horacio Rodríguez Larreta con 11%, siendo Unión por la Patria el tercero con 27%, pero su candidato ganador sería Sergio Massa con 21%, obteniendo esta coalición su peor resultado en la historia del peronismo.
Javier Milei en solitario logró lo que nadie más había hecho, dejar a tercios la próxima elección presidencial en octubre, ante un hartazgo de un pueblo argentino que empeora en su situación económica, además de una crisis institucional y de seguridad que tiene la psique argentina a tope, viendo en Javier Milei la oportunidad de un nuevo rumbo, algo más liberal.
Las propuestas de Javier Milei rompen con la clase política tradicional argentina, pues propone recortar el estado a tan solo 8 ministerios (secretarías en México), achicar el gasto público, dolarizar la economía para evitar un desastre inflacionario mayor y poder estabilizar la tasa, así como la desaparición de su banco central, implementación de un sistema de financiamiento a las estudiantes y no a las escuelas (Váuchers), con un modelo parecido en salud, además de una flexibilización del mercado laboral, un seguro de desempleo, eliminación de intermediarios en las ayudas sociales y reformas a la constitución para que no haya aranceles, siendo todo esto expresado en un discurso rudo, algo que le se le ha criticado en su forma pero en realidad, su fondo es lo que importa.
Es momento de reflexionar, pues todas estas propuestas ambiciosas en una hipotética presidencia de Milei, de ser cumplidas, sería el experimento del modelo liberal-libertario en América, tomando en cuenta que en México algún día podría aparecer alguien con este mismo proyecto, siendo una ironía, pues entre sus críticos se encuentra el presidente López Obrador, que lo ha llegado a comprar con un alemán de bigote famoso, siendo esto el experimento liberal para la región, o ¿Qué opinas?