23 de Noviembre de 2024
 

MEDIO ORIENTE: LA GUERRA INTERMINABLE / Jorge Luis Borboa

 

 

Muchas veces, pensamos en las partes del mundo que es mejor vivir, cosa que en realidad es demasiado confuso, pero es un hecho que hay países o regiones con peores situaciones que otros, teniendo el ejemplo más práctico, la parte occidental del planeta, teniendo en oriente una de las zonas con más conflicto de todo el planeta, por lo que se visualiza a Asia y África como los continentes más rezagados en estabilidad institucional y paz entre ciudadanos y países vecinos, como es el caso Israel y Palestina.

En estos días, Israel declaró la guerra al grupo terrorista Hamás por un ataque desde la Franja de Gaza hacia Israel, retomando las tensiones que ya existían a respecto. Hamás se funda en 1987 después del primer levantamiento, apoyando la liberación de Palestina y ha sido uno de los tantos grupos que desestabilizan la región. Además de que gobierna la Franja de Gaza desde 2007, y la UE y otros países occidentales consideran a Hamás una organización terrorista.

Esto al parecer no tiene un final ya que desde 1947 se ha tenido un conflicto, pues desde ese entonces cuando se asigna y funda el estado de Israel, comienzan las polémicas sobre cuál nación es legítima dueña del territorio, ocasionando una serie de movimientos entre palestinos e israelíes, pues para ese entonces nace la guerra fría, dejando como siempre a dos bandos: los soviéticos y los occidentales encabezados por USA.

Se debe recordar que desde antes de la Segunda Guerra Mundial, se tenía un problema en la región pues la convivencia entre diferentes grupos de personas con creencias distinta no daba para más, además de que Reino Unido ya no podría administrar la zona de oriente pues se sabe que desde 1945 dejó de ser la gran superpotencia, por lo que tenía que deshacerse de un dominio costoso en Medio Oriente. Es cuando recurren a la naciente ONU para establecer acuerdos territoriales para que en la zona hubiera una partición de territorio para los árabes y judíos, sin embargo no salió tan bien ya que nadie se puso de acuerdo porque en principio, existía y existe un repudio entre judío y árabes, a lo que no querían ajenos en la zona, además de que ninguno quedó satisfecho con la zona de partición, además del tema Jerusalén, pues se hablaba de internacionalizarla, cosa que a los sionistas no les gustó.

A partir de entonces, no hubo tranquilidad en la zona, pues nunca reconocerían la existencia de Israel, además de los conflictos con Palestina, habiendo un hecho inverso pues en 1947, la zona pequeña y marginada era Israel, pero hoy los pequeños y marginados son los palestinos, lo que complica todo pues no hay ninguna intención de equilibrio territorial de parte de los israelitas y los palestinos.

Todo inició desde el conflicto religioso, pero bien dicen que cuando lo mezclan con política, esto se vuelve de lo más volátil, pues en la cuestión bíblica se menciona el conflicto entre árabes y judíos por ser descendientes de Isaac e Ismael, hijos de Abraham, pero que se odian y por tanto sus descendientes, aunque lo cierto es que durante siglos vivieron en relativa paz e indiferencia entre ellos, siendo el detonante del conflicto la partición del territorio de 1947. Esto se complica pues Medio Oriente basa sus instituciones y leyes por la norma religiosa, es decir por sus escrituras y ahí viene el dilema, pues técnicamente por esas cuestiones a Israel si le corresponden esas tierras, pero no puede correr a los que ya la habitaban como Palestina.

Si bien toda la historia no es tan exclusiva del grupo HAMÁS, es necesario mencionar que por la parte religiosa es la base del conflicto, aunque es cierto que este grupo es financiado por países árabes y en este caso hay un antagonista escondido y es Irán, cosa irónica pues las relaciones entre Israel y Arabia Saudí estaban en buenos términos y mejorando pero eso no conviene a Irán, pues Arabia está en los BRICS así como Irán, cosa interesante pero que de alguna manera es motivo de pelea, pues a nivel general no hay buena relación entre estos países, queriendo evitar la relación entre Arabia e Israel.

Esto solo confirma que solo el pretexto del conflicto ha sido su base religiosa pero la esencia ha sido meramente geopolítica, con lo cuál determina un conflicto permanente en la zona, sin mencionar la influencia de las potencias occidentales y orientales sobre todo el asunto.

Las consecuencias para esto implican el éxodo de palestinos sin rumbo fijo, además de la intranquilidad perpetua de los israelíes, sin olvidar la salida de muchos a países diversos, entre ellos México.

Es momento de reflexionar ya que en todo esto es necesario no ser reaccionarios sino analíticos, pues no es muy inteligente culpar en exclusiva a un bando u otro, pues esto se ha hecho desde 1947, cosas que no va a cambiar a corto o mediano plazo, por lo cual es necesario pensar en lo que cuestiones como la religión puede ser una herramienta política para actos turbios, o ¿Qué opinas?



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