En diciembre de 2018 recibí la encomienda del presidente Andrés Manuel López Obrador de aliviar la carga financiera de las familias mexicanas representado por el pago de su vivienda.
A mi llegada al Infonavit, las y los trabajadores del país solicitaban desesperadamente una solución a sus deudas impagables. Ésta era la queja más constante, debido a que los créditos hipotecarios que otorgaba el Infonavit estaban tasados en veces salarios mínimos (VSM) a causa de las crisis financieras que vivió el país en el pasado.
Estos créditos eran impactados doblemente: tanto por los intereses como por los incrementos inflacionarios anuales. Los ajustes también afectaban directamente a las familias de las y los trabajadores acreditados, pues se veían reflejados en aumentos al saldo y las mensualidades.
Para atender esta problemática, implementamos el programa Responsabilidad Compartida, el cual busca convertir a pesos los créditos en VSM otorgados en las tres décadas pasadas.
Este programa brinda grandes beneficios como: mensualidades y saldos fijos durante todo el plazo del crédito, sin incrementos anuales; acceso a las tasas de interés más bajas del mercado hipotecario que dependen del nivel de ingreso; la aportación patronal se abona directamente a capital, por lo que el crédito se termina de pagar en un plazo menor; así como descuentos sobre el saldo y/o en las mensualidades.
No obstante, el principal beneficio es que las y los trabajadores tienen certeza del plazo en el que acabarán de pagar su crédito y consolidarán su patrimonio, ya que se les entrega una tabla de pagos mensuales con la fecha de término. Esto les otorga la claridad en los pagos y saldos restantes, conociendo por primera vez cuándo liquidarán sus créditos y brindándoles tranquilidad.
Por su tipo, extensión y velocidad de aceptación, este programa de refinanciamiento es uno de los más grandes del mundo. Entre marzo de 2019 y noviembre 2023 se han refinanciado cerca de 1.2 millones de créditos con beneficios para las familias, que suman más de 81 mil millones de pesos.
Existen programas similares en el mundo: el Programa de Refinanciamiento para Vivienda Asequible que se impulsó durante la administración Obama en Estados Unidos, que refinanció cerca de 300 mil créditos por año, o uno actual de la administración Biden (Fondo de Asistencia a Propietarios) que ha logrado, en estos años, un total de 392 mil beneficiarios.
Con Responsabilidad Compartida damos solución a una política de vivienda que se desarrolló en décadas anteriores: expansión sin control de las ciudades, viviendas alejadas de servicios, créditos caros denominados en VSM y pocas opciones para reestructurar financiamientos. Como consecuencia, llegaron las casas abandonadas y juicios masivos para quitar casas porque se habían diseñado créditos impagables.
Hoy, el Infonavit de la transformación regresa a su objetivo constitucional de otorgar crédito de vivienda barato y accesible para las y los mexicanos.
Además, con el actual Esquema de Crédito en Pesos, el Infonavit otorga las tasas de interés más bajas del mercado. También, con las nuevas reglas de otorgamiento de crédito, los financiamientos deberán estar ubicados dentro de las Zonas de Consolidación Urbana (ZCU); es decir, a menos de 2.5 km de centros de salud y educativos, de vías primarias de comunicación, centros de trabajo, de abasto y de esparcimiento, así como líneas de transporte público, y deberán contar con todos los servicios básicos.
En resumen, con Responsabilidad Compartida, el Infonavit pone al centro de sus acciones a las y los trabajadores. Hoy, quien desee convertir su crédito puede hacerlo en línea desde su casa a través de Mi Cuenta Infonavit. El Infonavit refrenda su misión social al corregir 30 años de malas políticas en materia de crédito a la vivienda.