-Debido al tope de gastos de campaña, candidatos no invirtieron en comidas para sus reuniones
Por Brenda Pérez Aguilar
Debido a los topes de campaña, este año el sector restaurantero de este municipio no se vio tan favorecido, esto a diferencia de procesos anteriores.
“En estas últimas semanas no hemos visto ningún repunte con las campañas electorales, se oye mucho ruido, pero desafortunadamente no hemos tenido repunte como en otros años”, comentó el gerente de un conocido merendero en este municipio, José Valera Marín.
Destacó que en otras campañas electorales tenían eventos más seguidos y en este proceso casi no, por lo que obviamente están resintiendo en gran forma y ahora una vez que ya finalizaron las campañas, ya no tienen esperanzas de tener repunte, por lo que prácticamente se quedan igual.
Asimismo, agregó que la feria de los cítricos 2018 tampoco les favoreció, debido a que se encuentran retirados del recinto ferial y normalmente, toda la derrama económica que se queda en este lugar.
Asimismo añadió que las salidas de las escuelas en cada año se ven favorecidos, debido a que son vacaciones y muchas familias aprovechan para venir a pasear o visitar a sus familiares, por lo que si se les incrementa la afluencia de comensales en un 30 o 40%, lo que significa un respiro, a fin de hacer frente en sus pagos.
Y aunque para las clausuras ya se perdió la costumbre de ofrecerles una comida a los padrinos y al graduado, la gente se limite para venir a un lugar público.
