-Precios de esa fruta son más estables y el mantenimiento de huertas resulta menos costoso
Por Facundo Bartolo Salazar
El cultivo de naranja es mejor opción que el limón para los productores de la región, pues los precios de esa fruta son más estables y el mantenimiento de huertas resulta menos costoso, por lo que algunos productores están cambiando a la naranja por cuestiones económicas y prácticas, pues con el limón solamente obtienen ganancias los coyotes y los empacadores, expuso Leobardo Pérez Rendón, en su carácter de citricultor.
Mencionó que “la verdad es que uno se llega a cansar de las altas y bajas del limón, después de dedicarle a las plantas tanto trabajo, tiempo y dinero, para que al momento de llegar a la subasta los compradores quieran regalado el producto, que ya estando cortado se tiene que vender a como dé lugar”. Comentó que de esa manera, los productores siempre se colocan en desventaja, sobre todo cuando el mercado de la fruta está totalmente desplomado. Añadió que es cuantiosa la cantidad de recursos que se les aplican a las huertas para obtener buena cantidad y calidad de limón, pero desafortunadamente, los productores se encuentran expuestos a tener pérdidas en lugar de ganancias.
Dada la situación, Pérez Rendón opinó que aquellos citricultores que tengan la oportunidad de cambiar o concentrar más sus esfuerzos al cultivo de la naranja, deberían hacerlo a la brevedad posible. Lo anterior, en virtud de que al año, el dinero invertido a una huerta de naranja no se compara a lo aplicado al limón, mientras que los ingresos son prácticamente los mismos.
Reconoció que, definitivamente, cada productor se enfrenta a situaciones diferentes, pero en general la naranja representa más estabilidad en cuanto a ingresos, de manera que sería conveniente analizar la posibilidad de cambiar a ese cultivo, dada la incertidumbre que siempre afecta al limón persa, a nivel de pequeños productores.