Por Álvaro Guerrero
Existe preocupación por parte de la población por los estragos que dejó el ecocidio que ocurrió en el estero de Tres Bocas, porque no pueden realizar la actividad para obtener un sustento económico y familiar, comentó Cecilia Huesca Panamá, habitante de esa comunidad antes mencionada.
Por lo anterior, enfatizó que, “ahorita mi preocupación es el pescado, que ahí teníamos para subsistir esta pandemia, pero desgraciadamente se murió el pescado, jaiba, todo eso murió, y la verdad todo eso nos afectó por todo, la pandemia y la mortandad de los peces, entonces, sacamos el pescado, pero ojalá hubiera sido para comer, lo tuvimos que sacar porque apestaban, porque rápidamente se pudrió por la contaminación”.
La actividad se mantendrá frenada por lo menos tres o cuatros meses, pues dijo que por el momento el estero no cuenta con especies acuáticas para que sean pescadas, ya que el ecocidio mató todo tipo y tamaño de animales, y solo quedan especies pequeñas que están en reproducción.
La crisis generada por la pandemia del Covid-19 no es el único problema que deben enfrentar, ahora también deben enfrentar los problemas causados por mortandad que es derivada a la irresponsabilidad por las empresas que ocasionan esos problemas en los cuerpos de agua.
Finalmente, dijo que rechazan la hipótesis de las autoridades, en donde refieren que el ecocidio se debió a un sobre calentamiento del agua que es lo que causó la mortandad de los peces, a pesar de eso, insistirán que las industrias son las culpables de provocar esos problemas a los mantos acuíferos, hasta que realicen una investigación profunda y les exijan que mejoren su infraestructura en el tratamiento de las aguas residuales.