Juan Carlos Jiménez
Para la población de Tlapacoyan ya es común empezar a escuchar o leer que surgirán fundaciones y asociaciones civiles como si fueran casas de la caridad, esto buscando atraer personas a quienes les prometerán desde despensas hasta viviendas o proyectos a fondo perdido.
A pesar de que la lucha municipal está lejana, ya en pocos días o semanas empezarán a aparecer oficinas de gestiones, fundaciones y asociaciones civiles, algunas sólo se dicen ser en beneficio de la población y algunas otras con su registro en forma.
Pero todas estas “casas de la caridad” abrirán sus puertas con la única intención de dar a conocer la imagen de una o varias personas que buscarán un puesto público en la próxima administración municipal.
Puestos desde la presidencia municipal, sindicatura, regiduría, dirección o de plano un puesto de confianza, mientras que otros más buscarán sólo visitar el palacio municipal cada quincena.
Este tiempo que falta para llegar al proceso electoral solo será propicio para un desfile de personajes y comparsas que los acompañarán en busca de algún puesto público, al servicio de sus correligionarios y no de la población tlapacoyense.