La pobreza es un tema muy controversial, una palabra que puede desencadenar emociones encontradas, que se usa en cualquier momento de la vida cotidiana, pudiendo ser de las palabras más populares que han existido, pero que a ojos de la mayoría, la pobreza significa la desventura y desamparo total para el individuo.
En el caso de México, la pobreza es tema de todos los días, pues nos encontramos en la calle a personas con más con menos o con nada, lo que indica que en la sociedad mexicana este es un tema sensible, pero a la vez crudo, sin embargo sería interesante indagar todos los factores que nos llevaron hasta este punto y si en realidad hay pobreza como tal.
Nos remontamos a las épocas de la colonia, donde empieza la creación de lo que hoy es México, pues existían desde ese entonces las clases sociales, teniendo como las grandes castas a los españoles y criollos, dejando al final a los mestizos, nativos y esclavos, significando el inicio de la desigualdad en una tierra donde abundaban los recursos como para crecer a la región, claro que ese no sería el destino de una colonia que se llamaba Nueva España.
Para los años independientes de México, nos encontramos con un sistema nuevo e inexperto, añadiendo que todos se peleaban por el poder y conspiraban unos con otros, dejando el desarrollo del país en un limbo o en el olvido. Llegando un avance considerable hasta el Porfiriato, donde el progreso se notó en las vías ferroviarias, el teléfono y la educación, dando una apertura para la superación y el crecimiento económico, cosa que la Revolución destruiría por 3 décadas, hasta el milagro mexicano de los 40s, siendo el petróleo el gran potenciador y generador de riqueza para el país. Todo esto cambiaría en los determinantes años 80s y 90s, donde el comercio y la globalización obligarían a México a adaptarse al contexto internacional, firmando tratados comerciales, estructurando redes financieras para el desarrollo y no solo depender del petróleo, impuestos y empresas estatales ineficientes.
Para los años recientes del nuevo milenio, la economía mexicana se convertiría en una de las más importantes e influyentes a nivel mundial, dando prueba de ello a que nos encontramos entre los 15 países más ricos del mundo. Vaya que es complejo, si se supone que somos de los países más ricos y con más potencial, ¿por qué hay un alto índice de pobreza?
Es prudente analizar no solo el contexto económico, sino el social, cultural y político, pues nos podemos llevar una gran sorpresa.
La nación siempre ha sido un enigma, pues la desigualdad es un factor clave para reconocer la razón de la pobreza en México porque en un país con potencial económico, comercial y posición estratégica tanto geográfica como política (internacional) es extraña la desigualdad, pero en México siempre fue parte de nosotros, por historia, por cultura y por egoísmo de algunos.
Muchas veces se confunde la desigualdad con pobreza, pero la realidad es que gracias a la falta de oportunidades, no todos pueden obtener un buen futuro, pues desde el nacimiento se está decidiendo cuanto te tocará luchar para salir adelante, pero sino tienes una buena educación, es probable que no obtengas la oportunidad de prosperar, cuando sabemos que tener un título no garantiza nada en un país competitivo.
Los hechos que determinan la condición de pobreza de más de la mitad de los mexicanos son: un estado corrupto e ineficiente, políticas económicas poco proactivas que inhiben la inversión, emprendimiento y creación de empleos, un sistema que no cubre las necesidades y servicios como la salud, agua, luz, drenaje y seguridad. Para culminar, tenemos a la educación, ya que si se hiciera más que aprenderse de memoria un libro y se diera una apertura pedagógica con ayuda del estado, se podría obtener el máximo potencial de cada individuo desde niños para ganar herramientas que cambiarían su perspectiva, como la educación financiera, la cultura lectora y el hábito del análisis, para no crear una sociedad de ignorantes, sino de personas con criterio, capaces de elegir a sus representantes con objetividad y exigirles un desarrollo para el país y no solo ayudas miserables que no cambiarán tu situación. La pobreza inicia desde la mentalidad y si desde niños no se les incentiva a tener un desarrollo integral de sus capacidades, de adultos no tendrán herramientas para enfrentarse a la vida y no sabrán exigir sus derechos.
Es momento de reflexionar, pues tenemos un país con recursos, ubicación geográfica envidiable, cantidad de habitantes suficiente para crear riqueza, potencial económico sustentado por la capacidad de inversión, el PIB, organismos internacionales y las relaciones pacíficas con todos los países del mundo. Sin embargo, tenemos una desigualdad histórica, un estado que se preocupa por intereses políticos y no de las necesidades de los ciudadanos para tener las mismas oportunidades, así como un sistema político, legal y de seguridad vulnerables a los intereses de élites políticas, empresariales o criminales ya sean a nivel nacional o internacional. Es por ello que tenemos que analizar lo que nos falta mejorar como sociedad y cambiar la perspectiva de nuestro pensar para así obligar a los que nos representan a que intercedan en la proyección de desarrollo integral, o ¿Qué opinas?