Por Jorge Luis Borboa
El pasado 5 de junio se dieron las elecciones locales de algunos estados, dejando muchas cosas claras y otras en un enigma porque en la política todo puede pasar, aunque hay hechos que no se pueden ocultar.
Para adentrarnos en el contexto, vislumbramos que el años pasado en las elecciones intermedias de México, el partido en el poder MORENA gana la mayoría de gobernaturas en disputa consolidando la mitad del territorio nacional en guinda, cosa que ya daba in antecedente de lo que sería en esta elección pues en la mayoría de los estados en disputa perduraba la inconformidad de los gobiernos de oposición pero que hace años eran del poder como el PRI que ha ido arrastrando un nuevo historial electoral devastador, mientras que el poder del PAN se hacía más pequeño, cosa que se confirma en esta elección.
El domingo pasado se eligieron a 6 gobernadores, ayuntamientos en Durango y diputados locales en Quintana Roo, siendo una elección más modesta en importancia electoral pero lo suficientemente importante para consolidar y desaparecer fuerzas políticas.
Haciendo un recuento de la elección tenemos a Aguascalientes de mayoría panista, además de ser un estado que había sido gobernado por el PRI hasta 1998, para ser panista desde entonces salvo el periodo 2010-2016, pero que en definición es de población más conservadora, lo que definía ya un triunfo anunciado para los azules, con María Teresa Jiménez Esquivel ganando el 53.65% de los votos aproximadamente, dejando en segundo lugar a la morenista Nora Ruvalcaba Gámez con el 33.59% de los sufragios, manteniendo la bastión para el PAN.
En el caso de Durango pasa algo interesante ya que actualmente gobierna el PAN con José Rosas Aispuro pero en esta elección gana el priista en colación con el PAN y PRD Esteban Villegas Villarreal con el 53.74% de la votación, dejando atrás a Juntos Hacemos Historia con su abanderada Marina Vitela Rodríguez con el 38.85% de la votación, pues los candidatos tendrían varios escándalos pero Marina Vitela protagonizó el último unos días antes de la elección, sin embargo la presencia de MORENA en la zona se incrementó pues ganó 16 ayuntamientos de 39, llegando a casi la mitad de dominio en la entidad, cosa que puede ir complicando las cosas a Va por Durango.
Desde este momento comienzas las victorias para los guindas ya que los estados mencionados anteriormente fueron los únicos que pudo conservar la oposición ya que los demás los perdería ante MORENA. Ahora vamos con Hidalgo que también se había anunciado que ganaría MORENA pero también se rumorea que el gobernador en funciones del PRI Omar Fayad estaba entregando el estado a cambio de blindaje político. Los hechos no mienten pues Julio Menchaca Salazar ganaría el 61.56% de la votación sobre el 31.31% de la priista Carolina Viggiano Austria.
Para la elección de Oaxaca pasa el mismo caso de Hidalgo porque se anunciaba un triunfo inminente de MORENA con las facilidades del gobernador Alejandro Murat también priista. Los resultados fueron contundentes ya que le dieron el triunfo a Salomón Jara Cruz de MORENA con el 60.26%, dejando en segundo lugar a Alejandro Avilés Álvarez del PRI con el 25%.
En el caso de Quintana Roo también se veía venir el triunfo de MORENA ya que el año pasado dominó el partido guinda, cosa que se confirmó el domingo pasado, quitando la gobernatura al PRD y el PAN, pues la ganadora Mara Lezama Espinoza con el 56.40%, dejando muy lejos a la perredista Laura Fernández Piña con el 16.13%, sin olvidar que el congreso local se lo lleva Juntos Hacemos Historia con 19 escaños de 25.
Para finalizar, tenemos a Tamaulipas que fue la elección más cerrada, además de ser muy tensa por la situación que atraviesa el gobernador actual, el panista Francisco Javier Cabeza de Vaca, que alteró la escala política, dejando finalmente al estado pintado de guinda con el triunfo de Américo Villarreal Anaya con el 49.99% dejando al panista César Verástegui Ostos con el 44.20% de los votos.
Con esto se concluye que el mapa político de México se consolida con MORENA como el partido hegemónico para el 60% de la población en México, dominando casi todo el sur salvo Yucatán, logrando consolidación en las costas este y oeste, salvo Jalisco y Yucatán que pertenecen a Movimiento Ciudadano y el PAN respectivamente, dejando a los gundas con 20 estados en solitario, logrando casi dos tercios de estados, salvo el centro norte de mayoría conservadora.
Es momento de reflexionar pues los resultados dejan a MORENA como la primera fuerza política consolidada de cara a las elecciones de Coahuila y Estado de México en 2023 y la presidencial en 2024, preguntándonos si las cosas cambiarán, o ¿Qué opinas?