29 de Noviembre de 2024
 

Un pensamiento de tantos

“No siempre crea usted en todo lo que le digan porque casi todo es mentira. La verdad es relativa. El mundo es demasiado grande para que alguien sepa de todo cuanto existe, y todo está hecho por un Gran Arquitecto divino, desconocido si, porque nadie jamás le ha visto pero si reconocemos todos en Él su inmensa grandeza y de cuánto nos maravillamos en esta vida.

            Vemos sus hermosas obras y reconocemos que jamás alguien podría hacer algo igual. El agua, el aire, la luz, la tierra, las plantas, flores, animales y millones de cosas son las que el Gran Arquitecto hizo y nos dio en un principio; pero al pasar millones de años, cuando llegamos a este mundo los humanos, empezaron los problemas, nos corrompimos, comenzamos entonces a dividirnos. Y así surgieron pillos que le dijeron a su pueblo: ‘Yo he visto al Gran Arquitecto del mundo y me ha encargado que les cobrara por todo lo que es de él’. Otros, vieron con esto su propio negocio y abrieron sus changarros. Las religiones y los gobiernos. El chiste es fregar al prójimo. Algunos dicen: ‘Si has pecado te vas al infierno pero si pagas te salvas’. No se deje engañar, use su razonamiento para que se dé cuenta y no crea en todo lo que le digan. El Gran Arquitecto divino todo lo ve, todo lo sabe, y sabe lo que hacemos y cómo nos comportamos y nos dará lo que a cada quien nos corresponda. Muchos miles en el mundo están en prisión por sus obras, otros sufren, otros gozan, otros tantos estamos en algún lugar, trabajando, luchando por disfrutar con nuestro trabajo lo que el Gran Arquitecto nos da. Sin embargo, debemos tener presente que lo que logramos no es nuestro, es de Él. Nosotros solo somos depositarios de sus beneficios, de sus obras, que debemos entregar a nuestros sucesores cuando llegue el momento de partir”.

            Este pequeño pensamiento, esta propositiva reflexión es de un gran visionario que observa, al igual que todos nosotros, la inmensa corrupción que han producido en nuestro planeta y en nuestra vida cotidiana, quienes detentan grandes cotos de poder. La forma en que se están moviendo actualmente los intereses de la industria, las religiones y los gobiernos del mundo, llevándonos por la ruta del engaño y las amenazas para que satisfagamos sus requerimientos. Samuel mi cuñado dice, “si no hacemos algo todos, si no salimos de nuestra gigantesca indiferencia, detestable pereza y aberrante ignorancia, estaremos aceptando el camino por el que hábilmente nos conducen estas instituciones. Despertemos, trabajemos y luchemos; practiquemos siempre la caridad y las obras sociales sin necesidad de intermediarios ni aspavientos. Pongamos nuestro granito de arena”. Considero que si hacemos esto, estaremos contribuyendo todos, en mucho, a mejorar la situación de nuestros hermanos en desgracia. Imagínese si todos lo hiciéramos, considero que las cosas mejorarían. ¿No lo cree usted así amigo lector? Piénselo un poco. ¡Qué tenga un buen día!

 

Luis Humberto.