Por Isabella Matías Heredia*
Evo Morales es sin duda un personaje que desde sus inicios en la política ha dado mucho de que hablar, se había distinguido por ser un líder social genuinamente se preocupaba por su pueblo, pero recientemente, su amada Bolivia lo expulsó de la tierra que el llamaba hogar y hoy es perseguido por la justicia. Evo Morales nació en el seno de una familia con escasos recursos de origen aymara, sus primeros años no recibió formación escolar debido a que tuvo que trabajar para ayudar económicamente a su familia. El joven Evo Morales comenzó su carrera como líder cocalero, ganó notoriedad internacional oponiéndose a la intervención estadounidense para la erradicación de los cultivos de coca, dicho movimiento acabó por consolidarse como partido político en 1999 tras la alianza con el Movimiento Al Socialismo, mejor conocido como MAS.
Para el año 2002 los masistas constituían la segunda fuerza política de Bolivia, sin embargo, Evo Morales perdió las elecciones ejecutivas ante Gonzalo Sánchez de Lozada. Pocos meses después Sánchez de Lozada tuvo que enfrentarse a una crisis política propiciada por el incremento a los impuestos, misma que ocasionó la rebelión de la policía. Con cada vez menos aliados Sánchez de Lozada renunció a la presidencia en octubre del año 2003 y buscó refugio en los Estado Unidos. En el 2006, con un contexto social inestable y bajo el lema “Somos pueblo, Somos MAS” Evo Morales, el líder aymara tomó protesta, convirtiéndose así en el primer presidente indígena de la nación y tan sólo en segundo en todo América Latina, siendo el primero nada menos que el mexicano Benito Juárez. El ahora expresidente de Bolivia comenzó su mandato con un gran optimismo de parte de la sociedad, ya que había arrasado en las urnas, había prometido enfocarse en las necesidades de las clases más bajas.
Algunos académicos se refieren al período del gobierno de Evo Morales como el “milagro boliviano” ya que, durante su gestión, Bolivia registró un crecimiento anual de alrededor del 5% y ese crecimiento económico se traducía en programas sociales que velaban por el bienestar de los ciudadanos. De la misma manera, en la constitución redactada en el 2009 bajo su mandato, hay grandes avances con respecto a la protección de los derechos de los pueblos indígenas. Cabe recalcar que algunos pueblos acusaron a Evo Morales de sólo proteger al pueblo aymara.
El exmandatario no estuvo exento de escándalos de corrupción, entre los más sonados fue el Fondo Indígena. El Fondo Indígena financiaba proyectos de desarrollo para los pueblos originarios de Bolivia, sin embargo, se destapó una red de desvío de recursos y entre los arrestados estuvieron varios colaboradores del gobierno masista. Pero, el error más grande que cometió Evo Morales fue querer perpetuarse en el poder indefinidamente. Con la nueva Constitución del 2009 el poder ejecutivo boliviano puede reelegirse solamente una vez y así cumplir dos períodos en la presidencia, es por ello por lo que Evo Morales pudo buscar la reelección y gobernar hasta el 2014. El mandatario boliviano buscaba gobernar un tercer período, pero su Carta Magna claramente especificaba que no era posible buscar un tercer período, entonces argumentaron que su primer período presidencial (2006-2010) no contaba ya que la Constitución que rigió ese período era diferente. Y ante una ola de descontento social Evo Morales pudo concluir su tercer período presidencial en el año 2018. Para poder contender a un cuarto período presidencial los seguidores de Evo Morales acudieron al Tribunal Constitucional, el cual falló a su favor dándole el permiso al ejecutivo de contender a la presidencia las veces que quiera. Semanas después de la toma de protesta del cuarto período, el descontento social crecía cada vez más, una ola de protestas se desató cuestionando la legalidad de las elecciones en las que Evo resultó ganador. Y después de casi 14 años en el poder Evo Morales dimitió del ejecutivo tras recibir presión por parte de las Fuerzas Armadas de Bolivia, y desde ese momento se convirtió en un refugiado político que incluso estuvo alojado en nuestro país.
El gran debate; golpe de Estado o una legítima recuperación del poder, si bien el procedimiento y el resultado de las elecciones fue de dudosa procedencia, la oposición no siguió las recomendaciones de la OEA (Organización de Estados Americanos), simplemente exigían la renuncia de un mandatario que jugando con las leyes del país había conseguido perpetuarse en el poder. El 18 de octubre de este año se celebrarán las elecciones presidenciales, en donde al partido MAS que alguna vez sostuvo el poder indiscutible, hoy se le negó su participación en la contienda electoral.
Es un hecho que el polémico Evo Morales se perpetuó en el poder de forma ilegítima, pero también se le reconoce el gran apoyo social con el que contó en su momento. Hoy más desprestigiado que nunca se ha visto envuelto en acusaciones de violación sexual, corrupción, dictador y un sinfín de delitos que se le atribuyen. Por otro lado, MAS (Movimiento hacia el Socialismo) ha sido censurado por la Suprema Corte de justicia, violentando la libertad de sus simpatizantes. ¿Será por miedo a que regresen legítimamente al poder? No lo sabremos al menos en estas elecciones. Hoy las encuestas las lidera Luis Arce candidato del MAS y Carlos Mesa, periodista. Dos Bolivias se enfrentarán el el 18, por un lado la Bolivia que quiere enterrar el pasado masista y la otra que busca mantener vivo el legado de Evo Morales.
* Tecnológico de Monterrey, campus Guadalajara. Licenciatura en Relaciones Internacionales