Enfoque Cultural
Por: César David Español Pasos, Adolfo Orea Vite y Salvador Cruz
Xico, municipio ubicado justo en las faldas del Cofre de Perote en nuestro bello estado de Veracruz, México, a sólo 30 minutos de la capital del estado Xalapa. Actualmente ostenta el título de Pueblo Mágico, y ¡vaya que lo es! Xico es una población de bellas calles empedradas, altas casas coloniales de teja y pórticos; con una vocación altamente religiosa, cuenta con una gran cantidad de iglesias y capillas que se distribuyen en todo el poblado. Pero su característica y riqueza cultural más importante reside en su gente y sus tradiciones, su patrimonio intangible. Sin embargo, la celebración que ha puesto en el mapa a este municipio es la fiesta patronal en honor a Santa María Magdalena, que se lleva a cabo durante todo un mes y cuyo día principal es el 22 de Julio.
Celebración que atrae las miradas de propios y extraños por su Xiqueñada, la puesta del arco floral, la alfombra de aserrín que se coloca a lo largo de la calle principal, los cencerros, la gran labor de las mayordomías y las danzas, entre otras cosas. “Los Tocotines”, “Los Santiagos”, la “Danza de Banda cruzada” y “Los Pavorreales” son danzas típicas de algunas regiones de los estados de Veracruz y Puebla, y en general de varios puntos en la República Mexicana, que han adquirido características muy propias en Xico; ejemplo y derivación de ello es la creación de la Danza de Los Payasos. Y es aquí en donde enfoque cultural hace una pausa para conocer tan sólo una pequeña parte de todos los significados y trabajos que integran las Danzas, para conocer la labor de uno de los artesanos encargados de crear el rostro que va a “transformar, esconder, proteger o liberar” al danzante que las usa; estamos hablando de la máscara. En días pasados tuvimos la oportunidad de charlar con Don Antonio Vázquez Tepo, Campesino, cacahuatero, nevero, artesano y compositor quien realiza sus labores en Xico:
Como campesino trabajó casi 30 años, después se casó y se puso a hacer máscaras, de esto tiene más de 40 años, pues cuando nació su hija Mónica fue a visitar a los abuelos de su esposa y uno de sus tíos estaba haciendo una canoa con un palo de aguacate, eso le dio la idea de hacer las máscaras, se hizo sus herramientas y fijándose en una máscara las empezó a elaborar.
Para hacer las máscaras utiliza como herramientas el formón, gurbias, achuelas, lesna, mazo, a veces le regalan los árboles, en ocasiones los compra o los va a cortar. Después de tener la madera, la lleva con el de la motosierra a que corte los trocitos de 20cm de largo por 20 de diámetro. Usa el quimite, palo santo, aguacate, lele, jonote y una que otra vez el cedro. Antes hacer moldes con papel, toma las medidas y hace la máscara original de los moros, la de toros, payasos, mujeres, hombres, charros, brujas, diablos, etc., también ha hecho varias figuras religiosas de madera. De todo lo que le pidan lo hace. Se tarda alrededor de dos días, trabaja desde las 6am hasta 2pm, pues hay que hacer las figuras, lijarlas y pintarlas. Hace unos años cobraba 200 pesos, se le hacía un precio justo porque es un trabajo artesanal y manual, que implica desde cortar la madera hasta pintarla. A la gente le ha gustado, las ha vendido a personas de Australia y Japón, porque a Xico asiste mucho turista. La gente de Teocelo también le visita para comprar para sus fiestas patronales. Todas las máscaras que hace son originales, de madera, tradicionales, no como las de papel o plástico. Las ha expuesto en varios lugares, como en Acapulco, donde hubo una exposición de artesanías internacionales.
Cabe mencionar que las Máscaras corresponden a rasgos humanos o animales, y de igual manera a figuras antropomorfas. Existen diversos tipos y diseños de máscaras llegando a ser tan diversas como la imaginación del artesano, sin embargo las máscaras más populares o típicas de Xico son cinco, siendo dos de ellas la variación de la máscara más tradicional, la Roja o de “Negro Separado”; de ésta se deriva la de Moro y la de Negro Pochita. Éstas se distinguen de otras regiones por el uso del color, el rojo y el blanco. La tradicional tiene la ceja poblada, dorada o plateada, abultada y rayada; en la zona inferior lleva la boca y el bigote rayado, también de color plateado o dorado, no lleva barba y el color rojo no se aparta del blanco. La de Moro es muy parecida a la tradicional pero se distingue por llevar separado el color rojo en la barbilla además de tener barba. Y el Negro Pochita es una variante que llegó hace 50 años con los Santeros, unos señores que venían a reconstruir santos y reinterpretaron la máscara; a ésta se le coloca soguilla y flores en el contorno. Las otras tres máscaras son la Charra que antes era Charro, siempre en compañía de un Toro y por supuesto el Payaso.
Sin duda alguna Xico es un pueblo lleno de magia y misticismo y personas como Don Antonio Vázquez Tepo y sus artesanías complementan toda esta magia.